La Junta Extraordinaria de accionistas de Société Foncière Lyonnaise (SFL), celebrada el 23 de abril en París, ha aprobado con más del 99,5 % de los votos la fusión por absorción con su matriz Colonial. La operación, ya validada por los consejos de administración de ambas compañías y por las autoridades regulatorias francesas, queda ahora a la espera de la aprobación definitiva por parte de los accionistas de Colonial en su próxima Junta General.
El acuerdo contempla una ecuación de canje de 13 acciones de Colonial por cada acción de SFL, que será cubierta mediante acciones propias de la compañía española. El proceso se inició en enero de 2025 y supone un paso estratégico dentro del modelo de crecimiento paneuropeo del grupo.
De materializarse, esta será la primera fusión transfronteriza entre una inmobiliaria francesa y una española que da como resultado una compañía con sede y cotización en España. La operación consolidaría una plataforma inmobiliaria de gran escala en Europa, con una cartera centrada en activos prime en ubicaciones clave como París, Madrid y Barcelona.
Ambas compañías comparten desde hace más de dos décadas una estrategia orientada al desarrollo de activos urbanos de alta calidad y valor añadido, apostando por carteras diversificadas de uso mixto en distritos centrales de negocios. La nueva estructura permitirá optimizar la eficiencia operativa, integrar equipos y reforzar el acceso a los mercados de capitales gracias a una plataforma más robusta y con mayor perfil crediticio.
Colonial, especializada en oficinas prime, gestiona más de un millón de m2 en Barcelona, Madrid y París, con un valor de mercado superior a los 11.600 millones de euros. Su estrategia se basa en la revalorización de activos a largo plazo, el servicio a una base de clientes de primer nivel y el impulso a la transformación urbana con criterios de sostenibilidad.
Por su parte, SFL, fundada en el siglo XIX, es una referencia histórica en el mercado inmobiliario parisino. Su cartera está valorada en 7.400 millones de euros y concentra algunos de los principales activos del distrito central de negocios de París, como #cloud.paris, Edouard VII o Washington Plaza. La compañía mantiene una apuesta activa por el desarrollo inmobiliario sostenible y la reducción de emisiones, con el objetivo de contribuir a la evolución urbana de su entorno.
La fusión no solo reforzaría la posición del grupo resultante como actor clave del sector inmobiliario europeo, sino que ampliaría su exposición a mercados con proyección de crecimiento en rentas, consolidando una cartera de inquilinos de alta calidad y un elevado poder de fijación de precios en ubicaciones estratégicas.