Argis, gestora centrada en el desarrollo de soluciones residenciales flexibles, prevé ampliar su cartera de flex living hasta alcanzar las 5.000 unidades en un plazo de tres años. Según recoge El Economista, la compañía entregará este año 1.500 apartamentos bajo este modelo, en un contexto marcado por la transformación de los hábitos de vida urbana y una creciente demanda de estancias temporales.
La estrategia de crecimiento se apoya en un pipeline activo de proyectos y suelo, así como en la reconversión de inmuebles existentes. En 2024, Argis adquirió cuatro edificios de oficinas con el objetivo de reconvertirlos en inmuebles destinados a flex living, tres de ellos orientados al alquiler y uno a la venta. Además, está ultimando operaciones de suelo con una inversión estimada de 150 millones de euros, enfocada principalmente en ampliar su presencia en el segmento flexible.
Estas inversiones se enmarcan dentro del segundo fondo de la compañía, dotado con 250 millones de euros de capital y con una capacidad de inversión global que podría alcanzar los 700 millones. La base inversora del fondo está compuesta mayoritariamente por capital institucional de origen estadounidense, europeo e israelí, complementado con inversiones familiares de Latinoamérica y España, según detalla el medio económico.
Argis mantiene un modelo de negocio centrado en la gestión activa de los activos a través de su operadora Flipco, con la intención de continuar operando los inmuebles tras su eventual venta. La compañía no persigue una estrategia patrimonialista, sino que busca consolidar carteras para su posterior rotación, permaneciendo como gestora.
El concepto de flex living promovido por Argis se dirige a un público con necesidades habitacionales temporales, en estancias que suelen situarse entre los dos y nueve meses. Se trata de un modelo basado en edificios operados bajo esquemas similares al apartahotel, orientado a perfiles como estudiantes de posgrado, profesionales desplazados, familias en transición o personas en tratamiento médico.
Según informa El Economista, la compañía basa su estrategia en un modelo operativo orientado a cubrir perfiles habitacionales con necesidades específicas y estancias temporales, alejándose de las fórmulas residenciales convencionales.