Jones Lang LaSalle señala que el trimestre registró un volumen total de transacciones superior a los 96 millones de euros
11 de abril de 2013.- Entre Madrid y Barcelona, y durante el primer trimestre del año 2013, se han cerrado transacciones de inversión en el mercado de oficinas por un valor total de más de 96 millones de euros, un 81% menos que los 505 millones de euros registrados durante el mismo período del año anterior, aunque esta cifra se vio desvirtuada por una única operación, la venta de Torre Picasso en Madrid a Pontegadea. Así lo muestra el estudio de la consultora inmobiliaria internacional Jones Lang LaSalle sobre el mercado de inversión de oficinas del mercado de Madrid y Barcelona.
Por ciudades, Madrid alcanzó los 38 millones de euros frente a los 58 millones de euros registrados en Barcelona. En la ciudad condal además, se han visto algunas operaciones de venta de edificios para un cambio de uso a hotelero.
Las rentabilidades prime se han mantenido estables este primer trimestre de 2013 en ambas ciudades, manteniéndose en Barcelona la rentabilidad en Paseo de Gracia/Diagonal en el 6,75%.
En Madrid por su parte, se estima una rentabilidad prime del 6,5% para volúmenes de inversión superiores a los 30 millones de euros. En productos ubicados en zonas más secundarias, la rentabilidad se sitúa actualmente en el 7,5%,.
Según Jones Lang LaSalle, se aprecia un interés creciente por parte de la demanda a raíz de las últimas operaciones de inversión de oficinas materializadas en Madrid y Barcelona a finales de 2012.
Los demandantes más activos siguen siendo los inversores de perfil oportunista, quiénes en función de la evolución de la situación económica y en particular, la del mercado inmobiliario español, entienden que deberían surgir oportunidades inmobiliarias con descuentos relevantes.
Sin embargo, la realidad es bien diferente a la que esperan los inversores oportunistas y tanto en Madrid como en Barcelona, la oferta de este tipo de activos es prácticamente inexistente.
Por otra parte los inversores privados continúan activos aunque siempre más enfocados al producto en ubicaciones prime con arrendatarios solventes. En Madrid se ha visto también en los últimos meses el interés por parte de inversores privados latinoamericanos.
"Seguimos apreciando una demanda de inversión activa y creciente aunque, con carácter general, alejada de las expectativas de precio de las escasas propiedades comerciales actualmente en venta. Quizás la puesta en marcha de la Sareb pueda generar un mayor flujo de transacciones"
ha idicado Juan Manuel Ortega, director de inversión oficinas Madrid de Jones Lang LaSalle.
"La mayoría de los propietarios de edificios de oficinas está constatando que para encontrar comprador deben ajustar los precios de sus activos a la realidad del mercado. Hecho que ya estamos viendo en propietarios como la Generalitat de Cataluña" añade Xavi Cotet, director de inversión oficinas Barcelona de esta consuiltora.
Por otra parte la Administración Pública parece que está dando los pasos necesarios para vender parte de su cartera inmobiliaria a través de subastas públicas y así generar liquidez. En el caso de la Generalitat de Cataluña por ejemplo, sus inmuebles siguen acaparando el interés de inversores internacionales en detrimento del inversor local, que ya conoce los activos y parece tener poco interés en pagar sobreprecios o recibir garantías limitadas en el cobro de rentas.