En un contexto marcado por la incertidumbre y las disrupciones tecnológicas, PlanRadar ha publicado sus proyecciones para el sector de la construcción e inmobiliario para 2024, enfocándose en la imprevisibilidad económica y los posibles cambios en el mercado. La proptech ha adoptado una perspectiva pesimista para el desarrollo del sector inmobiliario y de la construcción en el año en curso, anticipando una disminución en la actividad del sector. Esta proyección se basa en varios factores: las dificultades para obtener financiación, las altas tasas de inflación, el incremento en los costos de producción y la desaceleración de la economía global.
Según Álvaro Vega, director regional de PlanRadar España, la necesidad de adaptación tecnológica es imperativa ante la fluctuante economía y los desafíos geopolíticos globales.
El mercado inmobiliario europeo en 2024 se caracteriza por un crecimiento lento y desafíos económicos, afectados por políticas conservadoras en la concesión de préstamos y la subida de los tipos de interés. Estos factores impactan negativamente tanto en la construcción como en la inversión, con una posible disminución de la actividad constructora anticipada hasta 2025.
En particular, el sector de la construcción en Alemania enfrenta desafíos significativos, con una reducción esperada del 3,5% en el volumen de construcción para 2024, según un estudio del Instituto Alemán de Investigación Económica (DIW).
Según Álvaro Vega, director regional de PlanRadar España, la necesidad de adaptación tecnológica es imperativa ante la fluctuante economía y los desafíos geopolíticos globales
La variabilidad de la inflación y los tipos de interés sigue siendo una preocupación para el sector, con los bancos centrales aumentando las tasas en 2023. La esperanza de condiciones más favorables en 2024 se ve matizada por la incertidumbre sobre la inflación subyacente y sus efectos en la economía y la viabilidad de los proyectos de construcción.
La influencia de los factores geopolíticos en la confianza empresarial y la inversión es significativa, afectando a la confianza del consumidor y las decisiones de inversión. Los acontecimientos geopolíticos impactan también en los precios de las materias primas y pueden incrementar la indecisión en proyectos de gran envergadura.
La demanda de vivienda en Europa continúa siendo alta debido a cambios demográficos, con una creciente población urbana y una disminución en el tamaño de los hogares. Sin embargo, la respuesta a esta demanda se ve obstaculizada por la financiación insuficiente y la incertidumbre en el mercado de la construcción.
Sostenibilidad y digitalización, dinamizadoras del sector
En el ámbito de la sostenibilidad, la industria de la construcción está experimentando un cambio significativo, impulsado por regulaciones de la UE y esfuerzos innovadores para promover prácticas respetuosas con el medio ambiente. Según Álvaro Vega, las normativas ESG presentan desafíos pero también ofrecen oportunidades de mercado para edificaciones certificadas ecológicamente.
La digitalización emerge como un aspecto crucial para la industria, con un 97% de los profesionales esperando aumentos en la inversión tecnológica. Sin embargo, la resistencia al cambio y la adherencia a procesos tradicionales siguen siendo barreras importantes.
PlanRadar destaca la importancia de la adaptación tecnológica para enfrentar la incertidumbre económica y mejorar la eficiencia y la estabilidad financiera. La inversión en tecnología, junto con una preparación adecuada, puede proporcionar soluciones innovadoras y mejorar la competitividad y rentabilidad en el sector.
La digitalización y la sostenibilidad se perfilan como elementos clave para el futuro del sector de la construcción e inmobiliario, marcando el camino hacia la resiliencia en un entorno desafiante y en constante cambio.