Entrevista

“Es imprescindible ampliar el enfoque y superar la escala de la vivienda o el edificio”

“Es imprescindible ampliar el enfoque y superar la escala de la vivienda o el edificio”
Ángela Baldellou, directora del Observatorio 2030 del CSCAE.

La regeneración urbana es un proceso complejo que necesita una visión integral en la que la colaboración público-privada será esencial. Ángela Baldellou, directora del Observatorio 2030 del CSCAE, se muestra convencida de ello ante el desafío que tienen las ciudades de repensarse para adaptarse a nuevos hábitos de vida y nuevos usos y afrontar los retos del cambio climático.

Observatorio Inmobiliario: ¿Cómo se plantea el Observatorio 2030 la regeneración urbana?

Ángela Baldellou: La regeneración urbana es un desafío urgente que deben asumir las ciudades para adaptarse a nuevas formas de vida, nuevos usos y nuevas exigencias y demandas de la sociedad, pero también es un aspecto fundamental en la lucha frente al calentamiento global, ya que la tendencia sigue siendo la de habitar las ciudades y estas siguen creciendo, a pesar de ocupar solo el 2% de la superficie del planeta, albergando a más del 70% de la población mundial y generando el 70% de los residuos y de los gases de efecto invernadero. De estos el 36% procede de los edificios.

Por tanto, es imprescindible ampliar el enfoque y superar la escala de la vivienda o el edificio, planificando actuaciones de regeneración urbana en barrios, ampliando las superficies peatonales, mejorando la movilidad y apostando por ciudades policéntricas en las que la mayor parte de nuestros desplazamientos se realicen sin necesidad de vehículos (ciudad de los 15 minutos) y se reduzcan aquellos que son innecesarios. Estas medidas también mejoran la cohesión social de las comunidades e inciden en aspectos económicos. El Observatorio lo plantea como una necesidad inaplazable pero que exige un paso previo, el de definir, de manera integral, y con todos los actores implicados, un modelo de ciudad. No necesitamos un urbanismo táctico si este no se integra en un urbanismo estratégico general.

La Ley de Arquitectura o la New European Bauhaus reflejan la importancia, además, de abordar esta regeneración desde la calidad del entorno construido y el respeto a los valores identitarios y culturales.

Observatorio Inmobiliario: ¿Cuáles son las principales barreras para agilizar esta regeneración urbana?

Ángela Baldellou: La primera barrera es asumir esa necesidad de repensar, redefinir y concretar el modelo de ciudad. Este paso requiere un proceso riguroso que establezca unos criterios claros y bien definidos, quizás por una comisión mixta, con expertos y técnicos, y que doten a las decisiones posteriores de coherencia. La barrera principal es, por tanto, de concepto y de gestión. Deberíamos ser capaces de poner en marcha esa reflexión profunda teniendo en cuenta que en urbanismo las decisiones afectan a generaciones y deben tener cierta flexibilidad para mitigar los efectos y adaptar nuestros entornos con estrategias de diseño eficaces. Después hay barreras administrativas y burocráticas, comunicativas y de procedimientos, ya que hay que involucrar a los ciudadanos, informarles y explicarles los beneficios, los tiempos, las implicaciones… todo con absoluta transparencia. Son operaciones estructurales que requieren financiación y para esto se necesita fomentar la colaboración público-privada. La entrada de capital privado es esencial porque las administraciones no pueden asumir el coste “per-se”. Se requiere la modernización y el compromiso de los procesos productivos y de la estructura de la cadena de valor.

Pero si no se aborda desde esa integralidad, de manera colaborativa e implicando a todos los eslabones de la cadena, será difícil que la regeneración urbana renueve nuestras ciudades más allá de operaciones puntuales.

Observatorio Inmobiliario: ¿Qué papel debe tener la colaboración público-privada en la construcción de ciudades más habitables?

Ángela Baldellou: ¿Qué es una ciudad más habitable? Una ciudad más segura, más accesible, más sana, más inclusiva, más bella, más verde, más saludable, con más servicios, más cerca y eficaces, con infraestructuras que funcionen, con oportunidades laborables, con espacios públicos agradables, con viviendas asequibles... Habría que preguntar a los ciudadanos de cada urbe, pero seguro que saldrían todos estos factores en orden diferente en función de los barrios. Sería interesante que los priorizasen e ir abordando las urgencias en cada zona, sin descuidar la visión integral que es la que define esa habitabilidad.

La complejidad de un abordaje tan amplio hace que la colaboración público-privada resulte fundamental. Es esencial involucrar a los agentes que participan del proceso, tanto porque ellos también tienen que corresponsabilizarse de muchos de los compromisos y solo lo harán si perciben que son parte esencial y que se les toma en cuenta y que les compensa más allá del “deber moral”, como porque no cabe otra fórmula que viabilice las transformaciones que hay que asumir. Además, hay ejemplos magníficos que han funcionado, proyectos piloto que ya exponen las ventajas de una regeneración que incidiría de manera clara en mejorar nuestra calidad de vida y ejemplos en ciudades que evidencian que existe un retorno para sus ciudadanos, la ciudad y las empresas.

Observatorio Inmobiliario: ¿Cómo contribuye el Observatorio 2030 a la colaboración de los distintos agentes implicados?

Ángela Baldellou: El Observatorio 2030 ha creado una mesa transversal de colaboración público-privada que está trabajando con toda la cadena de valor identificando las barreras existentes ante los diferentes desafíos del sector y elaborando instrumentos y herramientas útiles para salvarlas y afrontar los retos de manera integral. Hemos establecido una metodología colaborativa, inclusiva, eficaz y rigurosa. Todas las recomendaciones y propuestas hay que ejecutarlas o intentar activarlas y para ello necesitamos difundir mejor y dar a conocer todo este material para que realmente se pueda utilizar y ayudar a la implementación de las acciones. No hay tradición de cultura colaborativa en el sector, pero el paradigma ha cambiado y solo juntos lograremos resultados. Tenemos una web increíble que refleja el éxito del modelo, la actividad de los grupos de trabajo y las líneas de actuación. Se ha convertido en un referente de información, datos, documentos e iniciativas sectoriales que han marcado la estrategia y unificado la visión. Somos un paraguas perfecto para acoger el relato de una transformación necesaria que deben asumir casi todos los agentes del sector. Estamos abiertos y decididos a seguir creciendo y a continuar siendo ejemplares con un modelo en red capaz de aterrizar medidas.

Observatorio Inmobiliario: ¿Qué retos plantea la gestión de los de los fondos europeos para la regeneración urbana?

Ángela Baldellou: Plantea retos de modernización burocrática y administrativa, pero los desafíos son oportunidades para mejorar y generar un modelo sectorial más eficaz y comprometido para el futuro. Hace falta voluntad de las tres administraciones en colaborar. El sector está preparado y asumirá sus responsabilidades, pero necesita que se solucionen ciertas trabas. La coyuntura internacional no ayuda, pero no puede ser una excusa. Tenemos que hacer las cosas bien en casa. Existen cuestiones que hay que abordar como la falta de mano de obra cualificada y la formación. Es necesario incentivar la demanda, difundir el contexto e impulsar un cambio cultural hacia la rehabilitación y la regeneración. La frustración si no se cumplen las expectativas será digna de estudio. Desde el Observatorio 2030 y desde el CSCAE se está haciendo un esfuerzo ímprobo para formar a los técnicos como agentes rehabilitadores, para generar herramientas y documentos de referencia, para concienciar a los ciudadanos y para estructurar una red de oficinas de rehabilitación en los colegios de arquitectos aprovechando su presencia local y su capilaridad, capaz de atender las dudas y la gestión de las ayudas de manera profesional y eficiente.