BREEAM Urbanismo analiza las oportunidades y retos que afectan a la sostenibilidad ambiental, económica y social de los proyectos. María Paz Sangiao, communities & new developments manager de BREEAM España, explica cómo está creciendo el interés por esta certificación mediante la que ya se han evaluado importantes desarrollos.
¿Cuáles son los principales desarrollos urbanísticos que se están certificando con BREEAM?
María Paz Sangiao: Una de las características del Manual de BREEAM Urbanismo es su versatilidad para ser aplicado a una gran variedad de proyectos, de diferente escala y tipología. Cuando pensamos en ámbitos urbanísticos tendemos a imaginarnos un barrio urbano convencional, pero con este esquema hemos evaluado desarrollos logísticos de gran tamaño como la Plataforma Central Iberum Multimodal o la Ciudad del Transporte de Montepino, en Illescas, y otro, también logístico, pero de menor tamaño, como Getafe Terminal. En el ámbito deportivo, hemos evaluado desarrollos como Espai Barça, que ha alcanzado recientemente el Certificado Provisional, y consiste en un proyecto de regeneración de todas las instalaciones del FC Barcelona; que incluye el nuevo estadio de fútbol, el Palau o las tiendas y oficinas del club.
En el apartado de regeneración urbana más convencional, hay proyectos certificados como La Integración del Ferrocarril en Logroño (LIF), un proyecto que ha permitido soterrar las vías del tren en la ciudad para crear un nuevo parque urbano que conecta dos áreas de la ciudad, hasta entonces separadas. Madrid Nuevo Norte es otro gran desarrollo que ha obtenido la Certificación Provisional, al igual que el Recinto Ferial de Gran Canaria (INFECAR).
¿Qué criterios se tienen en cuenta para certificar este tipo de proyectos?
M.P.S: BREEAM ES Urbanismo constituye un marco de referencia para la valoración de las oportunidades y los requisitos que afectan a la sostenibilidad de los proyectos tanto desde el punto de vista medioambiental, como social y económico. Se articula a través de un Manual Técnico estructurado en seis categorías: Gobernanza, Bienestar social y económico, Recursos y energía, Uso del suelo y ecología, Transporte y movimiento e Innovación. A su vez, estas categorías se subdividen en 40 requisitos, algunos de los cuales son obligatorios, y cada uno de ellos incluye una serie de criterios de evaluación específicos, a través de los cuales se detallan las exigencias cuyo cumplimiento cualifica la sostenibilidad de un entorno urbano.
¿A nivel internacional está extendido el hecho de certificar proyectos urbanísticos?
M.P.S: BREEAM es el sello que más certificaciones acredita. A mediados de este año contabilizaba más de 600.000 certificados en 93 países de los cinco continentes. Tanto a nivel internacional como nacional, la certificación de proyectos urbanísticos es creciente pero los números no son comparables a los de edificios. A escala global existen unos 110 proyectos con la metodología BREEAM Communities, el equivalente a Urbanismo en España.
¿Acompañan a los planeadores urbanísticos cuando están planteando el desarrollo para que directamente obtenga el certificado?
M.P.S: Nuestra labor con los planeadores es divulgativa, les exponemos por qué es importante incluir criterios de sostenibilidad en los proyectos y de qué manera vamos a facilitar su trabajo. A la hora de certificar debemos garantizar la independencia del proceso, que está regulado por ENAC. Para lograrlo, en los distintos esquemas de BREEAM existe la figura del personal asesor, un profesional independiente que ha sido capacitado y licenciado por nosotros. Su labor es la de asesorar y acompañar a los planeadores en el proceso de certificación para aplicar las medidas sostenibles óptimas.
Una vez que han definido su estrategia y presentan las evidencias que demuestran las medidas medioambientales y sociales que se aplicarán en el desarrollo, nosotros analizamos su propuesta y concedemos o no la certificación según los criterios cumplidos en base a nuestra metodología.
¿Seguir estos estándares facilita la relación con las administraciones públicas y la obtención de licencias? ¿Qué se podría mejorar?
M.P.S: La adaptación del esquema a la legislación estatal y su propia estructura ayudan a paliar la falta de tiempo y la escasez de recursos humanos, técnicos y económicos de las entidades locales. Esto hace que utilizar BREEAM Urbanismo ofrezca una alta seguridad administrativa, además de proponer medidas sostenibles que van más allá de las exigencias normativas.
Asimismo, la propia metodología está estructurada para alcanzar un gran nivel de detalle respecto a la planificación y ordenación urbanística, haciendo que sea una herramienta complementaria para el cumplimiento de otros marcos estratégicos como la Agenda Urbana Española (AUE) o los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Además, la implicación por parte de otros actores se vería intensificada debido a la gran importancia que desde BREEAM ES Urbanismo se da a la participación ciudadana, la co-creación, la revisión experta y la rendición de cuentas, de modo que las actuaciones propuestas alcanzarían un alto grado de aceptación pública y se alejarían de sesgos políticos.
Respecto a las mejoras necesarias, las administraciones están realizando un esfuerzo por incorporar cuestiones de sostenibilidad y digitalización en sus desarrollos. No obstante, hay margen de mejora en aspectos como favorecer una mayor implicación por parte de la administración pública en los proyectos, asegurar la continuidad del desarrollo a lo largo del tiempo, agilizar los procesos para la obtención de licencias o mejorar la transversalidad interna entre las diferentes áreas de gobierno.
¿Los promotores están realmente más interesados en apostar por estas comunidades y desarrollos más sostenibles?
M.P.S: El número de proyectos urbanísticos evaluados se incrementa cada año. Además, la experiencia con nuestros clientes es muy satisfactoria, ya que por el momento todos han reiterado sentirse satisfechos con las medidas sostenibles aplicadas y destacan que BREEAM Urbanismo mejora su sistema de planificación y les ayuda a no sobrecargar procesos que ya de por sí son excesivamente burocráticos.
¿Cómo están afectando las nuevas normativas europeas en esta mayor concienciación?
M.P.S: BREEAM es un sistema de certificación independiente, robusto, riguroso, de carácter holístico y basado en el conocimiento científico. Cuenta con una contrastada experiencia internacional, surgiendo con anterioridad a muchas de estas normativas, directrices y compromisos internacionales en cuestiones de sostenibilidad.
Los objetivos de BREEAM Urbanismo están completamente alineados con las aspiraciones de las directrices y políticas internacionales para reducir las emisiones y cerrar la brecha energética, aumentar la salud y bienestar de las personas, planificar las actividades sociales y lograr una harmonía económica y ambiental.
Ahora gana peso la Taxonomía europea, pero aquellas empresas del sector que han apostado por los certificados de sostenibilidad no tendrán problemas para adaptarse y cumplir las exigencias de este nuevo marco regulatorio.
El conjunto de esquemas BREEAM contribuye directa o indirectamente a cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible, especialmente en aquellos relacionados con la salud y el bienestar, la gestión eficiente de los recursos naturales, la conservación de los ecosistemas y la construcción sostenible. De forma específica, el esquema BREEAM Urbanismo incide directamente en el ODS 11 Ciudades y comunidades sostenibles. Otras estrategias y programas, como la Agenda Urbana Española, suponen la aceleración de este cambio de paradigma y resaltan todavía más la importancia de una metodología de evaluación como BREEAM Urbanismo, gracias a la cual podemos abordar problemas globales como la contaminación, el ruido, la pérdida de valor ecológico o valor social a través de la planificación espacial.