Fincas rústicas

2023: un año lleno de oportunidades para invertir en fincas rústicas

Enrique Gómez de las Heras - Periodista |
2023: un año lleno de oportunidades para invertir en fincas rústicas
Informe de tendencias en inmobiliario 2023 de Gesvalt.

Gesvalt ha publicado su informe de Tendencias para el año 2023, en el que estima que surgirán grandes oportunidades para grandes inversores en la adquisición de fincas rústicas productivas. El estudio, realizado por el equipo de Research de la compañía, analiza la situación de las fincas rústicas en España y señala que, pese a que la subida de los tipos de interés puede provocar un descenso en la adquisición de activos agrícolas, por parte de particulares o compañías de tamaño reducido, también puede suponer una oportunidad para grandes inversores interesados en hacerse con centrales hortofrutícolas y disponer de todos los activos necesarios para el proceso agrícola completo.

En este mismo sentido, Gesvalt señala que el otro factor determinante será el envejecimiento de los trabajadores del campo, ya que más del 30% de los titulares de explotaciones agrarias son mayores de 65 años y el 60% tiene entre 40 y 64 años. El relevo generacional puede generar un crecimiento en la compraventa de grandes fincas.

Por otro lado, Gesvalt destaca también que estas inversiones pueden ser propiciadas debido a los cambios en el estilo de vida de la población motivados por la inestabilidad política y económica mundial y que requieren de una transformación del modelo actual. Este escenario ha generado una transformación cultural hacia una agricultura cercana, de temporada, y más sostenible medioambientalmente. Para lograr este objetivo, la firma también advierte que el sector evolucionará hacia un modelo más profesionalizado y apostará por una mayor inversión en tecnología, que podría ser impulsado con el aumento de la presencia actores de gran tamaño en el sector.


El año de la revalorización agrícola

Según la consultora, el año 2022 ha sido desafiante para el sector rural debido principalmente a las significativas subidas de los precios de los alimentos, causado por el incremento en los precios de la energía, lo que ha aumentado los costes de producción y distribución y el de otros elementos igualmente importantes como los carburantes y fertilizantes.

No obstante, para este año 2023 desde Gesvalt esperan un crecimiento en el precio de la tierra destinada a cultivos. Estas previsiones son teniendo en cuenta que la evolución de los precios de la tierra en nuestro país entre el año 2020 y 2021 aumentó en 56 €/ha, y tras alcanzar la estabilización en la caída de los precios durante los tres ejercicios pasados.

Por otro lado, desde la firma también pronostican un aumento en la demanda de fincas para uso recreativo-residencial derivados del auge del teletrabajo y el desinterés de la población por las zonas urbanas y masificadas, lo que puede incrementar todavía más el valor de estos activos.