La adaptación de la vivienda al futuro

   Carlos Carrasco  CMO de Citibox Mucho hemos oído hablar de las “Smart Cities” o “Smart Home” que, al fin y al cabo, son nuevos términos fruto de los cambios que el Smartphone ha traído a nuestras vidas. Sin embargo, poco sabemos sobre cómo nuestras viviendas deberán adaptarse a “la era smartphone” e integrar todas las comodidades que éste nos aporta a nuestra vivienda. El alto ritmo de vida entre el trabajo y los quehaceres diarios han desembocado en una falta de tiempo que nos ha obligado a cambiar nuestro hábitos de compra. Con el objetivo de ahorrar tiempo en desplazamientos, la mayoría de nuestras compras se realizan desde nuestro smartphone, de hecho, el 70% de los españoles compra o contrata servicios desde el móvil. Sin embargo, siempre nos encontramos con la misma encrucijada, ¿Estaré en casa cuando llegue el mensajero con mi compra? En este punto es clave la adaptación de nuestras viviendas a la nueva era 2.0, de ahí, que actualmente alrededor de 10.000 viviendas han apostado por la instalación de taquillas electrónicas en las zonas comunes de sus edificios con previsión de aumentar hasta finales de 2017. Es clave para los vecinos poder recibir sus productos o servicios a domicilio sin necesidad de estar en casa y, además, tener la libertad para recogerlo cuando quieran o puedan. Esta implementación se ha convertido en la respuesta perfecta para el gran problema del ecommerce: la entrega de las compras online. En España, el 90% de las entregas de comercio electrónico resultan fallidas por ausencia del consumidor en el domicilio, de ahí la apuesta por apps como Citibox para integrar nuestra vida Smart a las comunidades de vecinos. Con la instalación de estas taquillas electrónicas se ha conseguido comunicar muchas comunidades de vecinos alejadas del centro que, hasta ahora, dependían del coche para realizar cualquier quehacer cotidiano. Desde el sector inmobiliario confirman que es un punto innovador y que revaloriza sobre todo aquellas viviendas que cuentan con el hándicap de la distancia con el centro. Hasta el momento, las alarmas han sido el principal método de seguridad para los hogares, sin embargo, gracias a la tecnología disponemos de sistemas que podemos controlar de forma sencilla desde nuestro teléfono. Actualmente, incluso existen sistemas que interconectan las viviendas con sus vecinos. Un ejemplo es una promoción inteligente situada en Madrid que se ha convertido en una de las primeras comunidades en compartir, además del jardín y la piscina, una interfaz común. Con este sistema se consigue una intercomunicación entre las viviendas y de este modo controlarlas de forma individual y colectiva. Hasta ahora hemos hablado sobre la vivienda del futuro desde fuera, pero ¿Y desde dentro? Varios estudios afirman, y la realidad lo corrobora, que las casas se gestionarán desde el smartphone (SmartHome). En un futuro las viviendas combinarán la domótica para conseguir hogares más sostenibles; la iluminación se adaptará automáticamente en función de la luz solar y la presencia de personas; los toldos, persianas y cortinas se abrirán o cerrarán según las condiciones lumínicas y la temperatura será siempre la idónea, puesto que la calefacción y la climatización se pondrán en marcha en función de la temperatura exterior y de la presencia humana. Sin duda, el reto inmobiliario del futuro se centra en los edificios inteligentes que no únicamente tienen que ver con la domótica, sino también en conseguir edificios sostenibles y eficientes. Para nosotros es clave trabajar mano a mano con los promotores inmobiliarios para conseguir la optimización de los inmuebles con la mejor tecnología y así aumentar el confort de los vecinos. [ ]  Nº 86 – Mayo 2017 de la vivienda al