Oficinas

La transformación de la oficina: del cubículo al centro de creatividad

Covadonga G. Quintana

Covadonga G. Quintana

Socia y CEO de Plug&go arquitectura corporativa

Tras el debate sobre si la oficina iba a desaparecer por un modelo virtual, nadie duda a estas alturas que no va a desaparecer, pero transformarse sí.

El enfoque fábrica que tenían muchas compañías con sus sedes sociales, más propio de la revolución industrial, iba copiando guiños del diseño de las tecnológicas, pero no pasaban a una transformación real.

Transformarse implica mucho más que pensar en el qué, bucear en los porqués. En esos porqués las compañías empiezan a armar un story telling interno muy alineado a su estrategia branded content y a un enfoque omnicanal donde la oficina permite abrazar el talento y el orgullo de pertenencia de aquellos que crean la marca.

Venimos acusando un cambio progresivo de superficie media alquilada que se sitúa por debajo de los 1.000 m2. Esto se traduce en proyectos de implantación mucho más enfocados a espacios comunes de interacción que a mesas y sillas individuales. La oficina se integra dentro de la estrategia de marca y la marca busca crear equipos que trabajan por proyectos y no tanto por tareas.

Este cambio de paradigma lleva a una visión global para aquellas compañías internacionales que visualizan Europa como un mercado global y nos estamos encontrando con la reunificación de sedes europeas en Madrid o Barcelona.

Las compañías están transformando la idea que se tenía de su oficina como lugar al que ir a trabajar. Esta nueva visión del posicionamiento de la oficina como experiencia de cliente interno (employee branding) cambia la forma en la que trabajamos.

Evoluciona el tipo de activo que las compañías buscan: “calidad y centralidad”, haciendo que los edificios prime en zonas prime tengan muy poca desocupación y son las zonas descentralizadas las que más sufren el cambio de estrategia.