La compraventa de viviendas en España ha alcanzado en el primer trimestre de 2025 su mayor volumen desde hace casi dos décadas, con un total de 184.087 operaciones inscritas. Así lo reflejan los datos publicados por el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, que recogen un incremento del 14,7% respecto al mismo periodo del año anterior, confirmando la recuperación de la actividad residencial tras el ajuste registrado en 2023.
Este volumen de transacciones no se alcanzaba desde el primer trimestre de 2007, justo antes del estallido de la burbuja inmobiliaria. Según la estadística oficial, el aumento ha sido generalizado en todo el territorio, con repuntes especialmente significativos en comunidades como Aragón (+38,7%), Extremadura (+35,1%) y Castilla-La Mancha (+32,5%), frente a incrementos más moderados en regiones como Cataluña (+6,8%) o la Comunidad de Madrid (+7,9%).
El grueso de las operaciones sigue concentrado en vivienda libre, que representa más del 90% del total. En concreto, se registraron 170.963 compraventas de vivienda libre, un 14,7% más que en el primer trimestre de 2024. Por tipo de vivienda, la usada continúa siendo la más demandada, con 143.759 operaciones (+16,3%), frente a las 27.204 correspondientes a obra nueva, que también crecen, aunque de forma más contenida (+7,2%).
Además del dinamismo en las transacciones, el precio medio de la vivienda libre ha experimentado una nueva subida y se sitúa ya en 2.033,4 euros por m2. Se trata del valor más alto registrado desde el segundo trimestre de 2008, lo que confirma la tendencia alcista de los últimos trimestres. El crecimiento respecto al mismo periodo del año anterior es del 4%, impulsado por la presión de la demanda en zonas con menor disponibilidad de oferta.
En cuanto al perfil de comprador, las personas físicas realizaron 170.178 operaciones, un 15,4% más, mientras que las personas jurídicas formalizaron 13.909 compraventas, lo que supone un leve descenso del 0,4%. Esta diferencia sugiere una mayor participación del comprador particular en el mercado residencial, frente a un ligero repliegue de los actores institucionales, que habían ganado protagonismo en años anteriores.
Los datos del Ministerio también muestran un incremento significativo en las compraventas realizadas por extranjeros, especialmente en zonas de costa y en mercados urbanos consolidados. Este comportamiento refuerza el peso del comprador internacional en el contexto actual, si bien el informe no especifica todavía el desglose por nacionalidades.
Este repunte de las operaciones se produce en un contexto de estabilización de los tipos de interés y de expectativas más favorables para el sector, con una reactivación progresiva de la promoción residencial y un retorno del inversor a los segmentos con mayor liquidez.