SodaCrowd ha iniciado su actividad en España lanzando su primer proyecto de financiación colectiva en el sector inmobiliario, una promoción de siete viviendas unifamiliares en Monte de las Encinas, Boadilla del Monte (Madrid). Esta iniciativa es el comienzo de una estrategia que busca incorporar la inversión participativa en desarrollos inmobiliarios de diversas escalas y ubicaciones, adaptándose a las particularidades del mercado local.
El modelo combina tecnología avanzada y regulación para canalizar capital hacia el sector. Gracias a la plataforma digital, inversores individuales e institucionales pueden participar desde 500 euros suscribiendo participaciones en una sociedad vehículo (SPV) que gestiona suelo y construcción. El proyecto proyecta una TIR del 19% y un retorno sobre el capital (ROE) del 50% en 35 meses, cifras que reflejan el atractivo del modelo para perfiles variados.
Este enfoque democratiza el acceso a la inversión inmobiliaria, tradicionalmente reservada a grandes patrimonios, al permitir pequeñas aportaciones con seguimiento riguroso y transparente. El entorno digital centraliza documentación y ofrece informes periódicos que mantienen informados a los inversores, favoreciendo confianza y comodidad para todos.
Selección rigurosa y transparencia como base
Un valor diferencial de SodaCrowd es su meticuloso proceso de selección y control. La plataforma actúa como intermediaria digital entre promotores e inversores, evaluando cada proyecto antes de su publicación. Solo aquellos que superan revisiones financieras, técnicas, legales y comerciales pueden atraer capital, asegurando operaciones firmes y riesgo limitado.
Para este desarrollo en Madrid, SodaCrowd colabora con Lemon Promoción Gestión y Desarrollos S.L., empresa española fundada en 2011 con más de 50 proyectos y cerca de 2.400 viviendas entregadas. La experiencia del promotor mitiga riesgos y confirma viabilidad comercial y técnica.
Las viviendas tendrán aproximadamente 550 metros cuadrados construidos sobre parcelas de 2.000 metros cuadrados, con precios que oscilan entre 4.500 y 6.000 euros por metro cuadrado. Este rango asegura un equilibrio entre calidad, atractivo para compradores y rentabilidad para inversores.
SodaCrowd añade un sistema de Project Monitoring externalizado que permite un seguimiento independiente del avance de la obra. Los inversores pueden consultar la evolución del proyecto a través de la plataforma tecnológica, que centraliza información financiera y técnica e informa periódicamente sobre el estado de la inversión.
La inversión se formaliza mediante una sociedad vehículo que otorga a los socios propiedad indirecta sobre el activo. Esta figura permite la desinversión al cierre del proyecto, tras liquidar y repartir beneficios, alineando intereses y garantizando seguridad jurídica para todas las partes.
Un mercado español transformado por digitalización y regulación
El mercado inmobiliario español vive una transformación marcada por la digitalización y la búsqueda de alternativas a la financiación bancaria tradicional. La subida de costes, restricciones crediticias y necesidad de capital flexible impulsan el crecimiento de plataformas de crowdfunding reguladas por la CNMV, que permiten a promotores medianos y pequeños y a inversores diversificar sus carteras con productos más accesibles, controlados y transparentes.
En este contexto, SodaCrowd se posiciona como un actor destacado en la financiación participativa. Respaldada por la experiencia de Soda Capital—grupo con más de 15 años en Latinoamérica, donde ha financiado más de 120 proyectos y gestionado 470 millones de euros sin impagos—la compañía llega con el objetivo de profesionalizar e incorporar esta modalidad a las necesidades del mercado local.

Emiliano Rapaport, CEO de SodaCrowd España, afirma que la plataforma busca construir un puente entre promotores que requieren financiación a medida e inversores que demandan operaciones con control, transparencia y rentabilidad. Su propuesta integra experiencia internacional con regulación española, dando como resultado un modelo ajustado y transparente.
La filial española proyecta canalizar unos 20 millones de euros en su primer año, siempre bajo criterios estrictos para equilibrar rentabilidad y control de riesgos. Esta estrategia apunta a consolidar a SodaCrowd como referente en inversión participativa.
Digitalización, regulación y confianza son los pilares que sostienen este crecimiento. La tecnología optimiza análisis, suscripción y seguimiento; la supervisión de la CNMV aporta un marco normativo claro; y la transparencia promueve una comunidad inversora sólida y comprometida.
Para inversores, el crowdfunding representa una vía innovadora de diversificación con rendimientos ajustados al riesgo; para promotores, un canal flexible ante limitaciones crediticias. A medio plazo, SodaCrowd prevé diversificar su cartera con proyectos sostenibles, sector terciario, atraer capital institucional y ampliar su red en diferentes comunidades.