Durante 2023, el mercado inversor ha experimentado una actividad significativa en el sector hotelero, estimándose un cierre del año con un volumen total de capital invertido que superará los 3.000 millones de euros. Esta cifra podría igualar o incluso superar las inversiones realizadas en 2022.
La Conferencia Anual de Inversión Hotelera, organizada por Cushman & Wakefield y celebrada en el Intercontinental Madrid Hotel, ha destacado este hecho en su debate. La conferencia, titulada "La inversión hotelera se reinventa en un mercado maduro", ha contado con la presencia de más de 250 profesionales del sector y el patrocinio de IHG Hotels & Resorts y Vignette Collection.
Albert Grau y Bruno Hallé, socios y codirectores de Cushman & Wakefield Hospitality en España, han presentado en el evento un análisis de la situación actual del sector y los desafíos futuros. Grau ha enfatizado el "dinamismo de la actividad inversora en la segunda mitad del año", destacando un incremento en las transacciones que permitirán superar los 3.000 millones de euros en total para 2023.
Por su parte, Hallé ha señalado la tendencia de los inversores hacia el segmento vacacional y las categorías de lujo y upper upscale. Ha destacado además adquisiciones notables como el Mandarin Oriental en Barcelona, el Palacio del Retiro en Madrid, y los hoteles W y The Standard en Ibiza, considerados como "activos trofeo".
Para 2024, se anticipan desafíos como los altos tipos de interés, la adopción de criterios ESG y un contexto geoestratégico cambiante. Hallé ha subrayado la importancia de impulsar los criterios ESG en la industria hotelera, no solo para cumplir con las regulaciones, sino también para mejorar la posición de los activos en el mercado. Asimismo, se ha destacado la gestión del agua y la digitalización como factores clave para el futuro operativo del sector hotelero, junto con la importancia de contar con equipos profesionales cualificados para ofrecer el mejor servicio posible.