WIRES (Women in Real Estate Spain) ha celebrado en el COAM el encuentro ‘Impacto de la inflación en el sector inmobiliario’, en el que se ha realizado una panorámica completa sobre cómo la inflación está afectando al real estate español actual y futuro. Para ello, WIRES ha organizado una mesa redonda en la que han estado presentes perfiles de todos los segmentos: Teresa Marzo, CEO de Elix y vocal de la junta rectora de ASPRIMA; Patricia Hernández, directora general de negocio de Vía Ágora; Guillermo Jiménez, director general de ACR Grupo, y Luis Mena, CEO de Daikin. La mesa estuvo moderada por Mónica Sanz, directora jurídica de CIVITAS y socia de WIRES. El encuentro, además, ha contado con la participación de Pedro Álvarez, economista de Caixabank Research, quien ha ofrecido una visión macro de la temática tratada.
Álvarez ha abierto la jornada compartiendo el análisis de Caixabank Research en el que se incide en que los factores externos sobre los que no se tiene control son determinantes, como la guerra en Ucrania o el problema de los suministros, que han reducido la oferta. Esto, unido al incremento de la demanda tras la pandemia, ha provocado el disparo de la inflación y, con ello, la subida de tipos, “una subida mayor de lo que esperábamos por el miedo a que se enquiste la inflación”.
Para 2023 auguran un recorte en las previsiones de crecimiento y una gran incertidumbre, pero no aprecian caídas sustanciales del PIB. Sobre la inflación, “se moderará en torno al 4,5 %”. En cuanto al sector inmobiliario, esperan una oferta similar, en torno a las 100.000 viviendas al año, y un apunte hacia la moderación del mercado residencial, en el que la oferta se mantendrá y la demanda será baja o estable.
Tras la presentación, Mena ha destacado que el conjunto de la demora en la oferta, la demanda creciente y la crisis energética ha provocado un colapso en la entrega de equipos que hace que se produzca una repercusión en los precios. Además, señala la Ley aprobada por el Gobierno en septiembre que grava a los fabricantes de refrigeración con una tasa sobre el refrigerante que incluye a cualquier equipo. “Esto es un coste en origen que tenemos que repercutir y cuando llega al final de la cadena supone un incremento inflacionista”.
Para Guillermo Jiménez, “nos encontramos una elevada volatilidad de los precios difícil de prever. Todos los materiales han impuesto una tasa por la variación energética, y en los últimos meses se aprecia estabilización, pero no esperamos una bajada a corto plazo”. Jiménez afirma que se ha producido un 30% de incremento en los precios que afecta a su compañía, pero también al resto de integrantes de la cadena de producción, que asegura han asumido entre todos. “Intentamos minimizar el impacto de la subida de los precios”.
Patricia Hernández ha señalado que han tratado de mantener una fórmula mixta entre la construcción con su constructora propia y externas en lugares donde no cuentan con recursos propios y se han encontrado que no son capaces de encontrar contratos fuera porque se prolongan por la incertidumbre actual. Coincide con Jiménez en el apoyo entre proveedores para asumir la subida de precios y costes. “No trasladamos costes a los compradores de lo que estaba ya firmado”, pero monitorizan y asegura que, si hay recorrido de precios, pueden darse subidas.
Teresa Marzo ha compartido sus estimaciones, que se basan en una disminución de las transacciones, del poder adquisitivo, con un incremento de la tasa de esfuerzo que provocará que ciertos colectivos no puedan plantearse la compra de la vivienda. “Habrá una disminución en la compraventa de viviendas, dejando una cifra en torno a las 550.000 transacciones”. Por segmentos, “en obra nueva habrá una moderación en el incremento de los precios y en segunda mano será el mercado quien irá marcando la pauta”. También apunta a que existe un desequilibrio entre la necesidad del inversor y lo que a este le ofrece el mercado.
Todos los ponentes han coincidido en que existe una incertidumbre generalizada y una posición de wait and see, pero lejos de lo vivido en 2008.
Tras el evento, se han hecho entrega de los premios Amigos WIRES, que en esta edición se han entregado a José Antonio Granero, Socio Fundador en ENTREABIERTO y AGREGA (Agencia de Regeneración Urbana); y Eloy Bohúa, CEO en Planner Exhibitions.