La sostenibilidad y la digitalización, los grandes retos tras la pandemia

La sostenibilidad y la digitalización, los grandes retos tras la pandemia
El teletrabajo es una oportunidad para consolidar la transformación digital de la construcción.
Para impulsar la digitalización, los expertos coindicen en la necesidad de favorecer una mayor coordinación entre promotores, arquitectos y constructores


La sostenibilidad y la digitalización son dos de los grandes retos a los que deben hacer frente los sectores de la construcción e inmobiliario en el escenario surgido tras la pandemia. Así lo revela el "Informe Construcción y Real Estate - Retos, Tendencias y Oportunidades’, realizado por TechEstate, la nueva plataforma de Barcelona Building Construmat (BBConstrumat).

El estudio, presentado en una sesión online por la directora de BBConstrumat y TechEstate, Ione Ruete, junto con la CEO de Innomads, Mireia Garcia, recoge la visión de más de 20 líderes sectoriales que coinciden en señalar que el interés de la sociedad por un mundo más sostenible tendrá un destacado impacto en el desarrollo de los sectores inmobiliario y de la construcción.

Esta adaptación, según los expertos, además de ser un reto, supone también una oportunidad de crecimiento, especialmente, en el ámbito de la optimización de los residuos utilizados en la obra, el desarrollo de nuevos materiales con mayor vida útil, y el impulso a la rehabilitación para ajustarse a las nuevas normativas medioambientales.

Asimismo, el trabajo destaca la necesidad de impulsar la digitalización para favorecer la industrialización y la automatización de los procesos constructivos. Para ello, toma como modelo al sector automovilístico, donde existe un grupo de proveedores y un sistema digitalizado de diseño y fabricación, lo que permitiría, por ejemplo, reducir costes y minimizar el impacto medioambiental. Además, haría posible que el futuro propietario de un inmueble lo pudiera personalizar.

No obstante, los expertos estiman que para la consolidación de esta tendencia sería necesario una mejor formación específica de los técnicos y una mayor coordinación entre todos los industriales que intervienen en una obra, así como entre promotor, arquitecto y constructor.

El teletrabajo cambia viviendas y oficinas

El documento también analiza el impacto de la COVID-19 en la actividad sectorial. En este sentido, señala que la implementación del teletrabajo supone una oportunidad para consolidar la transformación digital de la industria de la construcción, pero que, además, ha obligado a repensar las viviendas, con espacios más abiertos, y las oficinas, con un aumento del mercado del coworking.

Por otra parte, los participantes manifiestan que los fondos europeos destinados a la reactivación económica son una ventaja para estos dos sectores muy afectados por el parón de la actividad.