¿Cuál es la misión de RICS (Royal Institution of Chartered Surveyors) en términos globales y cómo se desarrolla en España?
RICS es la organización líder mundial de profesionales vinculados con el inmobiliario, construcción y urbanismo y todo el ‘natural and built environment’; es decir suelo, ya sea para promoción o explotación agrícola, el entorno marítimo o cualquier tipo de edificación. Su misión es contribuir a la profesionalización del sector, a través de sus estándares internacionales, su autoregulación y su acreditación reconocida internacionalmente como garantía de confianza. RICS no solo mejora la reputación de los profesionales que representa, sino que sobre todo ofrece confianza a los usuarios. Sus miembros, no solo debemos demostrar un alto nivel de competencia y experiencia, sino también nuestro compromiso ético y con la sociedad, a lo largo de toda nuestra carrera profesional. Como ejemplo, las valoraciones RICS son exigidas como el estándar de referencia por bancos centrales y gobiernos. Las empresas y los usuarios solicitan trabajar con profesionales acreditados RICS ya que éstos necesitan cumplir con estrictas normas que evitan los conflictos de interés, la corrupción y el blanqueo de dinero, la cibercriminalidad, etc. RICS también ofrece conocimiento y diálogo ante temas que afectan al medio en el que vivimos, organizando encuentros, conferencias y formaciones para los profesionales del sector y para otros actores relacionados. Existe un foro de pensadores y expertos del sector en todo el mundo –el World Built Environment Forum– donde se debaten y aportan soluciones a los desafíos a los que se enfrenta el planeta, las ciudades y la gente que vive en ellas, a través de su experiencia profesional y compartiendo ideas novedosas. RICS además ofrece recomendaciones y publica estudios sobre las tendencias del mercado en el mundo, como el Commercial Property Monitor que publicamos cada trimestre y que utilizan inversores internacionales y entes financieros como el Banco Central Europeo.
Los estándares de medición inmobiliarias son parte de la esencia de RICS y hay mucho por hacer para establecer un estándar único y global. ¿Cómo puede ahora como Chairman de RICS dar fuerza a este proceso en España?
Aunque ya se ha hecho una parte importante de este trabajo queda mucho por hacer con el apoyo de otros actores del sector. Deberíamos estar pensando en códigos, estándares para cada tipo de inmueble y que se adoptan siempre. Creo que el sector tiene que hacer un esfuerzo en este sentido para que los clientes puedan confiar en los ‘m2 ’ como un hecho y entender que se computen según unos estándares del sector con terminología sencilla y universal. Sobre todo, durante mi presidencia trataré de explicar la importancia de adoptar normas universales en la construcción, para evitar enormes costes derivados de la falta de transparencia y ante la imposibilidad de comparar datos.
RICS es muy reconocido en la regulación de valoraciones. ¿RICS está enfocada en los valoradores o quiere ir más allá?
La credibilidad de valoraciones y su regulación es muy importante pero, como he comentado antes, RICS engloba mucho más. Es precisamente esta visión amplia lo que le permite asegurar que existe un debate ssobre temas relacionados con el sector que son relevantes –ya sea temática social, tecnológica, económica o de las administraciones públicas–. Así, en los últimos años hemos abierto nuestra acreditación a una gran variedad de profesionales que están contribuyendo al desarrollo económico de este país trabajando trabajando en el ámbito financiero, valoradores, gestores de grandes proyectos de infraestructura, profesionales de la construcción, arquitectos, facility managers, profesionales del inmobiliario residencial y terciario.
En su reciente nombramiento como presidente de RICS en España ha afirmado que tiene como objetivo asegurarse de que la profesión esté preparada para el futuro ¿Cuáles son los retos que tienen que afrontar los profesionales inmobiliarios en los próximos años?
Para mí el reto principal es que todos los profesionales estén bien equipados para afrontar cambios de tendencia –ya sean del mercado, de tecnología o provocados por temas políticos–. Vivimos un momento en el que, no solamente los cambios se suceden muy rápido, sino también cualquier incidente internacional relevante podría tener repercusión en nuestro país. Una formación continua es cada vez de mayor importancia. También tenemos que asegurar que RICS sea atractiva para las nuevas generaciones, por eso en breve publicaremos un estudio sobre el futuro de la profesión y cómo, tanto la organización como sus miembros, debemos adaptarnos. Lo presentaremos en el próximo salón MIPIM.
¿Cómo contribuye una organización internacional como RICS a que se puedan proporcionar los nuevos servicios profesionales que demandan la economía y la sociedad?
RICS con su ámbito global está muy bien posicionado para no solamente reaccionar rápido a una demanda para nuevos servicios sino también para tratar de anticiparla.
¿Cuáles serán las líneas de acción concretas que emprenderán usted y el nuevo consejo de RICS en España?
En breve nos reuniremos para definir estrategia y prioridades. No obstante, para mí es clave aumentar el nivel de involucración de los miembros con RICS. Tenemos que trabajar en una política de inclusión y pertenencia. Asegurar que exista un orgullo de ser miembro de RICS –que cada uno sea un embajador y convenza a otros de querer serlo–. Dada la diversidad de nuestros miembros creo que tenemos mucho que ofrecer en cuanto a especialidades y regiones.
¿Cree que los cambios sociales, económicos y de consumo obligarán a replantear los criterios de inversión y actuación inmobiliaria?
Si, una cosa muy atractiva del sector es que es muy dinámico. Está en constante cambio. Cada ciclo trae diferentes retos y oportunidades. El sector tiene que ser aún más consciente de sus responsabilidades sociales y ser muy exigente en su autoregulación en temas como ética, confianza y buen gobierno.
Desde su punto de vista, qué importancia les da a factores como la innovación y la sostenibilidad en la concepción y gestión de los proyectos inmobiliarios
Estos factores son imprescindibles y tienen que formar un pilar central de cualquier proyecto inmobiliario hoy en día. Esto implica que hay que incorporar en el equipo a profesionales con otra formación que la tradicional. Algo que es bastante complejo dado que seguimos ‘experimentando’ mucho en estos temas y existen muchas tendencias que aún no son nada claras en cuanto a cómo evolucionarán.
Usted tiene una dilatada trayectoria en el sector y amplia experiencia inmobiliaria en nuestro país. ¿Cómo ve al sector inmobiliario español en el corto y medio plazo? A su juicio, ¿qué riesgos y qué oportunidades se presentan de cara a los próximos años?
Soy muy optimista. Creo que el sector se ha profesionalizado mucho. Ha llegado más capital internacional con todas sus exigencias (especialmente en promoción) y la financiación es mucho más sostenible que en el anterior ciclo. Parece que los tipos de interés van a mantenerse a niveles muy bajos y las previsiones económicas para España no preocupan en general al sector.
En su opinión, ¿en qué fase del ciclo inmobiliario nos encontramos en España?
Mi opinión es que el sector muestra características de una fase de madurez. Veo estabilidad. No existe un boom porque tenemos un mercado en equilibrio. Hoy en día la situación del mercado de ocupación es muy importante y soy muy positivo. No existe en general ni una gran sobre-oferta, ni infraoferta. En general cuando viene un desplome en precios es porque hay un desequilibrio. No prevemos esta situación a medio plazo.
De una forma sintetizada, ¿cómo cree que evolucionarán en España los diferentes mercados “tradicionales” en el corto y medio plazo? ¿Y los llamados sectores alternativos?
En oficinas la demanda del inversor seguirá alta; la demanda del ocupante es positiva dado que exige oficinas modernas y más eficientes. Los propietarios tendrán que ofrecer más servicios a sus inquilinos. En cuanto al retail, la demanda del inversor ha sufrido algo por las dudas en otros países en cuanto a la demanda en tienda física. Sin embargo, es evidente que la tienda física seguirá formando una parte clave de la estrategia del comerciante. Creo que pronto vamos a volver a ver inversores volviendo al mercado porque el sector en España no está sobrevalorado. Por su parte, la logística vive un momento muy boyante, en parte porque la especificación de nave ha cambiado y son muchas las que están casi obsoletas. También el debate del papel de la logística en comercio online está provocando mucho interés por parte de inversores. Hay que ver cómo se desarrolla este tema porque el modelo actual de la entrega de producto comprado online no es sostenible ni para el comerciante, ni para el comprador. Por último, los activos alternativos engloban muchas actividades y no es posible entrar en detalle, pero creo que son tipos de inversión que están aquí para quedarse. Normalmente implican un rol activo en la gestión del negocio y tenemos operadores calificados para satisfacer las necesidades del inversor inmobiliario. Todavía, en mi opinión, existe una gran necesidad de inversión en proyectos de carácter social –por ejemplo, vivienda en alquiler, infraestructura, salud, tercera edad etc.– Aún tenemos que encontrar la fórmula adecuada de partnering entre la administración pública y el capital privado.