21 de junio de 2013 (EP).- La eficiencia energética es un negocio con potencial en el que las empresas tienen a su disposición cerca de 6.000 millones de euros en fondos europeos y en el que los consumidores pueden ahorrar hasta 7.000 millones de euros al año, indicó en un encuentro con la prensa el presidente de N2E y la Fundación Renovables, Javier García Breva.
García Breva consideró que la eficiencia puede jugar un papel en la reactivación de la economía española e insistió en que Bruselas percibe este nicho de negocio como parte de sus políticas de innovación tecnológica.
Bruselas, indicó, ya está dando prioridad a tres grandes vectores, que son la eficiencia energética para conseguir el objetivo del 20% de ahorro de consumo de energía en el 2020, la apertura de la competencia a través de un mercado integrado y, en tercer lugar, el incremento del consumo de renovables, que bajan el precio mayorista de la electricidad.
Como parte de esta estrategia, el presidente de N2E explicó que la Unión Europea ya desarrolla instrumentos financieros que favorezcan y estimulen las inversiones en eficiencia energética y rehabilitación de edificios.
Las directivas recogen este aspecto, hasta el punto de establecer que los Estados miembro constituirán un Fondo Nacional de Eficiencia Energética para activar recursos que financien la inversión en proyectos de eficiencia energética.
En todo caso, explicó, la herramienta financiera más efectiva que propone la Unión Europea es situar a la eficiencia energética como una prioridad en los presupuestos de la UE. Como consecuencia, ha duplicado para el periodo 2014-2020 los recursos destinados al ahorro de energía con respecto al anterior periodo.
Como resultado de esta iniciativa, el Consejo Europeo ha aprobado destinar el 20% de los Fondos FEDER a este aspecto y, dentro del Programa Horizonte 2020, dedicar más de 6.000 millones de euros a proyectos de eficiencia energética, principalmente en las ciudades, y a la eliminación de barreras técnicas y administrativas que impiden el acceso de los consumidores a los servicios energéticos.
El experto, que ha creado con Imedia la Oficina de Javier García Breva para trasladar al debate público aspectos relacionados con la energía, consideró además que el éxito de estas medidas dependerá en parte de las comunidades autónomas, que son las que tienen que crear capacidades y normas para poner en marcha proyectos de eficiencia energética con el fin de aprovechar los fondos estructurales europeos.
30% DEL CONSUMO
El 30% del consumo energético se produce en los edificios y viviendas y el potencial de ahorro es muy significativo, más incluso cuando la UE se ha comprometido con la rehabilitación de los parques nacionales de edificios.
"La eficiencia energética no debe limitarse a un trámite formal y administrativo sino que debe constituir un compromiso por el desarrollo económico y la innovación que impulse el sector de los servicios energéticos en España, añadió.