Klépierre ha revisado al alza sus previsiones financieras para 2025 tras publicar los resultados correspondientes a los nueve primeros meses del ejercicio. El grupo prevé un crecimiento del EBITDA del 5,5% y un aumento del flujo de caja neto recurrente del 4% interanual, hasta 2,70 euros por acción. En el conjunto del trienio que concluirá en diciembre de 2025, estas magnitudes habrán avanzado un 23% y un 21%, respectivamente.
En lo que va de año, los centros comerciales de la compañía han registrado un comportamiento positivo: los ingresos netos por alquileres aumentaron un 6,5%, o un 4,2% en términos comparables, mientras que los ingresos por actividades complementarias —como retail media, eventos y alquileres temporales— crecieron un 10%. Las ventas de los retailers se incrementaron un 3,3%, apoyadas por un alza del 2,3% en las afluencias, y la tasa de ocupación se situó en el 97%, con un ratio de costes de ocupación del 12,5%.
Durante los nueve primeros meses de 2025, la demanda de espacios comerciales se mantuvo estable, con un aumento de rentas del 4,6% en renovaciones y nuevos contratos. Este dinamismo se concentró en los centros prime de Europa del Noroeste, Central y del Sur, donde destacaron categorías como salud y belleza, ocio y restauración.
En el ámbito financiero, Klépierre mantiene una deuda neta equivalente a 6,9 veces el EBITDA, con un coste medio del 1,9% y una vida media de seis años, cifras que la sitúan entre las compañías inmobiliarias europeas con mejor perfil crediticio. En septiembre, la deuda neta consolidada ascendía a 7.352 millones de euros.
El grupo ha emitido además un bono verde a 12 años por 500 millones de euros, el de mayor plazo lanzado por una SOCIMI europea desde 2022, con un diferencial de 103 puntos básicos. Klépierre cuenta con calificaciones crediticias de rango A, entre las más altas del sector inmobiliario cotizado europeo.
En materia de sostenibilidad, la compañía ha mantenido su posición en el índice GRESB 2025, donde ocupa el primer puesto mundial en la categoría retail y encabeza el ranking de inmobiliarias cotizadas europeas, con una puntuación de 95 sobre 100 y una calificación de cinco estrellas. Estas evaluaciones reconocen su estrategia bajo el programa Act4Good, que fija el objetivo de alcanzar la neutralidad en carbono en 2030.
Los ingresos totales de Klépierre alcanzaron 1.213,4 millones de euros en los nueve primeros meses de 2025. La compañía prevé cerrar el ejercicio con un flujo de caja neto recurrente en línea con sus nuevas proyecciones y una rentabilidad media por dividendo del 6%, consolidando una trayectoria de crecimiento estable durante los últimos tres años.