El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Jorge Rodrigo, ha visitado el desarrollo urbanístico de Valdecarros con el objetivo de conocer de primera mano el avance de las obras. Durante el recorrido, Rodrigo expresó su respaldo a un proyecto que, según afirmó, será determinante para mejorar el acceso a la vivienda en la región.
Acompañado por el presidente de Valdecarros Madrid, Luis Roca de Togores, y su gerente, Domingo Menéndez, el consejero fue informado del estado actual de los trabajos. Está previsto que la urbanización de las tres primeras etapas finalice a principios de 2026, lo que permitirá activar la construcción de más de 13.500 viviendas.
En declaraciones durante la visita, Rodrigo señaló que “se trata de un proyecto urbanístico que incluye más de 50.000 viviendas, que albergarán a unas 150.000 personas, equivalentes a la población de ciudades como Burgos o Badajoz”. A su juicio, iniciativas de esta magnitud “deben seguir recibiendo el apoyo institucional para incrementar la oferta y facilitar la moderación de precios”.
El consejero destacó que aproximadamente la mitad de las viviendas serán de protección pública. “Valdecarros no solo es importante para Madrid, sino también para toda la región. Desde el gobierno regional estamos trabajando para que cada vez haya más vivienda disponible”, apuntó.
Por su parte, Luis Roca de Togores indicó que el proyecto de reparcelación podría aprobarse a comienzos de 2026, lo que permitiría el inicio de las obras de edificación ese mismo año. Entre las actuaciones previstas, subrayó la integración del Bus de Tránsito Rápido (BRT) en el trazado urbano, fruto de la colaboración con el Ayuntamiento de Madrid y la Empresa Municipal de Transportes (EMT). “Ya hemos conectado Valdecarros con el Ensanche de Vallecas, cerrando un anillo de movilidad eficiente y sostenible”, afirmó.
Con 51.656 viviendas previstas, de las cuales el 55% serán protegidas, Valdecarros es actualmente el mayor desarrollo urbanístico de España y uno de los más extensos de Europa. Su superficie total alcanza los 19 millones de m2, incluyendo siete millones destinados a zonas verdes. Una vez finalizado, acogerá a unos 150.000 residentes.
La inversión en obras de urbanización supera los 2.000 millones de euros, cifra que se eleva a 8.000 millones si se incluye el total del desarrollo inmobiliario. En términos de empleo, se prevé la generación de 70.000 puestos de trabajo directos y 480.000 indirectos durante su ejecución.
El proyecto contempla además medio millón de metros cuadrados de superficies comerciales, de los cuales más de 150.000 estarán distribuidos a pie de calle. La localización del desarrollo, entre la M-40, M-45 y M-50, cuenta con accesos adicionales desde la M-30, A-3, M-31 y R-3, lo que refuerza su conexión con el resto del área metropolitana de Madrid.