La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha dado aprobación definitiva al proyecto de estatutos y bases de actuación para constituir la Junta de Compensación del Área de Planeamiento Paseo de la Ermita del Santo. Según informó el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, la iniciativa ha sido impulsada por la comisión gestora del ámbito, integrada por propietarios que representan el 99,7% de la superficie total.
La decisión permite avanzar en la transformación de este entorno del distrito de Latina, prevista a partir del próximo año, tras la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana aprobada por el Pleno municipal en junio. El acuerdo también incluye la designación del concejal de Latina como representante del Ayuntamiento en el órgano rector de la junta de compensación.
El proyecto contempla la construcción de 530 viviendas, reservando el 28% para hogares con algún tipo de protección dirigidos a población con renta baja. De los 56.790 m2 edificables de uso residencial, 40.800 m2 se destinarán a vivienda libre, 6.460 m2 a vivienda de protección pública básica y 9.530 m2 a vivienda de protección pública de precio limitado. Además, los vecinos del barrio de Los Cármenes accederán a casi el 70% de una superficie de 44.349 m2 que actualmente es de dominio privado.
Zonas verdes, conexión urbana y nuevos equipamientos
El desarrollo prevé un espacio de centralidad local donde la edificabilidad para equipamientos públicos se triplica respecto al plan inicial, pasando de 5.211 m2 a 18.879 m2. Se incorporan casi 11.000 m2 de áreas estanciales y espacios libres arbolados y 5.600 m2 adicionales de zonas verdes. El diseño incluye un corredor verde de 60 metros que enlazará el parque de la Ermita del Santo con el de Caramuel, generando nuevas conexiones peatonales hacia Madrid Río.
El ámbito, delimitado por el paseo de la Ermita del Santo, la calle Sepúlveda y el parque de la Cuña Verde, ha sufrido una reducción progresiva de actividad comercial debido a la obsolescencia de instalaciones construidas en torno a 1985. Esos edificios, con usos deportivos y terciarios de baja ocupación, dificultan la llegada de nuevos residentes y actúan como barrera física para la conexión con los espacios verdes del entorno. El proyecto mantiene el zócalo comercial solicitado por los vecinos y prevé transformar el actual complejo comercial y deportivo en un centro urbano local.
El plan incorpora la reubicación del Teatro Goya y la construcción de equipamientos públicos en posiciones estratégicas. También se prevé dar continuidad a las instalaciones deportivas de la avenida de Los Caprichos mediante la ampliación de espacios anexos y la ejecución de una piscina pública cubierta junto a salas de gimnasio y fitness.
La actuación se enmarca en los criterios de la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360. Las edificaciones en altura se orientarán en eje norte-sur para optimizar la ganancia solar en los meses fríos. El planeamiento incorpora arquitectura bioclimática y prevé cubiertas vegetales en las azoteas de los edificios con el objetivo de configurar un barrio más eficiente en términos energéticos y ambientales.