El precio de la vivienda libre en España registró un aumento interanual del 12,2% en el primer trimestre de 2025, según los datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Se trata del mayor encarecimiento interanual desde el primer trimestre de 2007, cuando este indicador creció un 13,1%.
La estadística refleja también una subida trimestral del 3,5% respecto al último trimestre de 2024, lo que confirma una aceleración sostenida en la evolución de los precios residenciales. Con este nuevo avance, el índice de precios de vivienda acumula once años consecutivos de subidas interanuales.
Por tipo de activo, el mayor incremento se produjo en la vivienda usada, cuyo precio creció un 12,3% en tasa interanual. La vivienda nueva también experimentó un notable aumento del 12,2%. En términos trimestrales, los precios de la vivienda nueva subieron un 5,5%, mientras que los de segunda mano lo hicieron un 3,2%.
Aunque el Instituto Nacional de Estadística (INE) no proporciona datos en euros por metro cuadrado en su Índice de Precios de Vivienda (IPV), otras fuentes ofrecen estimaciones al respecto. Según el Colegio de Registradores, el precio medio de la vivienda en España alcanzó los 2.226 euros por 2 en el primer trimestre de 2025, con un incremento trimestral del 2,9%. Desglosado por tipo de vivienda, la usada se situó en 2.153 euros por m2 (+1,9% trimestral) y la nueva en 2.467 euros por m2 (+5,5% trimestral).
Todas las comunidades autónomas y las ciudades de Ceuta y Melilla registraron alzas superiores al 10% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Andalucía y Melilla encabezaron los incrementos, con una subida del 14% en ambos casos. Les siguieron la Región de Murcia (13,3%) y Aragón y La Rioja, con un 13,2%. Las subidas más moderadas se observaron en Baleares (10%), Cantabria (10,2%) y Castilla-La Mancha (10,4%).
Este comportamiento se produce en un entorno marcado por una fuerte demanda, una oferta limitada de vivienda, escasez de suelo finalista y elevados costes de construcción. A ello se suma el interés inversor en sectores como el alquiler o la obra nueva. A pesar del ritmo de crecimiento, distintos expertos del sector descartan un escenario de burbuja, al considerar que la concesión hipotecaria sigue regida por criterios prudentes y que el endeudamiento de los hogares continúa contenido.
La evolución de los precios en los próximos meses dependerá en gran medida del comportamiento de los tipos de interés, la inflación y el nivel de actividad promotora. El sector estará también pendiente de cómo se materializan las nuevas políticas públicas de vivienda previstas en el Plan Estatal y de los efectos de la Ley de Vivienda en aquellas comunidades donde ya se ha empezado a aplicar.