Ardian y Rockfield Real Estate han adquirido un proyecto de residencia de estudiantes en el complejo Blue Gate de Aquisgrán, que comprende 300 apartamentos tipo estudio y 2.200 m2 de superficie comercial. La finalización y entrega de las viviendas está prevista para el verano de 2026, con ocupación programada para el curso académico 2026/2027.
La operación, formalizada a HLG Real Estate, supone la primera inversión conjunta de ambas compañías en el mercado alemán en el marco de su estrategia paneuropea de alojamiento para estudiantes (PBSA), que ya alcanza más de 700 millones de euros en activos y unas 6.000 camas en ciudades como Maastricht, Leiden, Florencia, Bolonia, Ámsterdam, Milán y Barcelona. El objetivo es superar los 1.000 millones de euros en activos gestionados a finales de 2025.
El proyecto de Aquisgrán se sitúa en las inmediaciones de la estación central de tren y forma parte de un desarrollo de uso mixto que también contempla un hotel y espacios de oficinas. La parte hotelera ya se encuentra alquilada, mientras que el arrendamiento de las oficinas está en fase de cierre. La superficie total destinada a los apartamentos para estudiantes asciende a 8.400 m², con unidades de aproximadamente 21 m² completamente amuebladas, distribuidas entre la primera y la quinta planta.
La planta baja, con 2.900 m2, albergará zonas comunes y locales comerciales, de los cuales el 80% ya está alquilado. El proyecto contará además con espacios compartidos interiores y exteriores, y con un equipo de gestión in situ.
Con alrededor de 60.000 estudiantes, Aquisgrán es uno de los principales centros universitarios de Alemania y concentra una fuerte demanda de alojamiento, impulsada por la presencia de la RWTH Aachen University y la Universidad de Ciencias Aplicadas CBS, así como por su proximidad a Bélgica y los Países Bajos.
La estrategia conjunta de Ardian y Rockfield en PBSA se centra en crear una cartera diversificada de activos en mercados europeos con elevada demanda y oferta limitada de residencias para estudiantes, entre ellos Alemania, Países Bajos, Italia, España, Portugal y Francia. El plan sigue un enfoque core+, con el objetivo de mejorar el rendimiento operativo de los activos y avanzar en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en línea con el Acuerdo de París.