Instituto de Valoraciones cambia su nombre a Valum, con el objetivo de reflejar mejor su identidad corporativa
Una "estructura moderna, totalmente digital, donde la cualificación personal y el talento son imprescindibles". Ésa es la imagen que pretende reflejar la compañía liderada por Jesús Rodríguez Estrada.
Sus planes de futuro pasan ahora por aumentar su cuota de mercado y ofrecer a sus clientes un porfolio de servicios más completo. Aunque su mayor desafío será continuar su crecimiento en un sector que se adentra en un período de cambios muy profundos, explica el CEO de la compañía.
Aunque Instituto de Valoraciones ya goza de reconocimiento entre los clientes, la nueva marca Valum ha comenzado a coexistir con ella para dejar de manifiesto la andadura de la entidad, que ofrece los servicios tradicionales de tasación y valoración, junto a soluciones AVM, análisis de coste, estudios de mercado, viabilidad de proyectos, valoración de la eficiencia energética y control de servicios de valoración para entidades financieras, asesorando durante todo el ciclo de vida inmobiliario.
Por otro lado, la compañía ha anunciado que escindirá parte de su departamento de I+D, creador de soluciones como Smarta, su conocido sistema de AVM; o de IV Force, su software de gestión y ejecución de valoraciones, para crear una nueva compañía: Inteligencia Versátil, que continuará estos desarrollos y su comercialización con total independencia