La promotora inmobiliaria ha vendido a un inversor internacional este singular inmueble de gran valor histórico, ubicado en la localidad vizcaína de Gatika, que pertenecía a su patrimonio desde 2005
Desde Inbisa aseguran que la decisión de la venta se ha tomado dentro de su "política de rotación de activos" y de "potenciación" de sus áreas estratégicas, ya que el castillo no forma parte de su core business, que actualmente "se focaliza en el desarrollo de promociones residenciales, industrial-logísticas y terciarias", explican.
Desde su adquisición en 2005, la inmobiliaria ha priorizado la conservación de este edificio y su entorno natural, contando, en todo momento, con la colaboración de técnicos especialistas en diferentes áreas. De ahí que hasta ahora no hubiesen querido vender pese a haber recibido varias propuestas de compra en los últimos años.
"No hemos querido dar el paso de su venta hasta encontrar unos compradores que se han comprometido a una conservación adecuada de este bien histórico y único en España. Sus nuevos propietarios han valorado su atractivo, la riqueza y diversidad de los jardines y especies arbóreas de su entorno, su construcción singular e historia y, según hemos podido constatar, tienen la intención de restaurarlo, respetando y protegiendo en todo momento su carácter histórico", argumentan desde Inbisa.
Un inmueble con mucha historia
Reconocido como Patrimonio Histórico Español y con la categoría de Monumento, el Castillo de Butrón es una muestra de los castillos románticos europeos. Aunque fue construido en la Edad Media por el linaje de Butrón (concretamente en el siglo XIV), a finales del siglo XIX (1879-1899) fue remodelado por Francisco de Cubas y González-Montes, Marqués de Cubas, quien le confirió su apariencia actual. En el año 1994 se ejecutaron las últimas obras de rehabilitación.
Este histórico inmueble, a 20 kilómetros de Bilbao, tiene una superficie construida total superior a los 2.400 m2 y está situado en un parque con más de 35.000 m2, un entorno privilegiado con innumerable y diversa fauna y flora. El edificio dispone de planta baja, entrepiso, cinco plantas, cubierta y cuatro torreones, el más alto de los cuales es conocido como la Torre del Homenaje, construida en el siglo XIX. En su interior se encuentran varios salones, una zona de recepción de invitados, la antigua capilla, el salón de la chimenea, un gran salón diáfano de 200 m2, el patio de armas, el almacén de víveres, un pozo de agua natural, una biblioteca, bodega e incluso mazmorras. Las distintas dependencias están decoradas de forma exquisita y cuentan con mobiliario, iluminación, cocina, calefacción y un parking exterior.
En los últimos años ha servido de emplazamiento para la organización de eventos, y ha sido escenario de spots publicitarios y programas de televisión.