En Madrid el crecimiento fue del 61%, sumando 956 millones
27 de febrero de 2014.- La inversión inmobiliaria no residencial en las nueve principales ciudades europeas -Londres, París, Berlín, Hamburgo, Frankfurt, Munich, Bruselas, Milán y Madrid-sumó 56.600 millones de euros en 2013, certificando un incremento del 25% respecto al ejercicio anterior. Son datos del elaborado por la consultora inmobiliaria BNP Paribas Real Estate.
La ciudad de
Londres se vio impulsada por el buen comportamiento de su mercado de ocupación. La inversión en oficinas y
retail en la capital británica registró un incremento del 34% y 95%, respectivamente, en 2013. Por su parte, la inversión en las
cuatro principales ciudades alemanas creció un 16% en 2013, con 15.000 millones de euros de inversión inmobiliaria no residencial, si bien Berlín registró un descenso del 12% respecto al nivel record de 2012.
Paris, con un contexto económico más complejo, se mostró resistente y el volumen de inversión se mantuvo estable en torno a los 9.000 millones de euros.
Mercados más pequeños, como
Milán y Madrid, están atrayendo inversores que buscan incrementos de valor. Estos dos mercados registraron mejoras en 2013, cimentadas en un boyante mercado de inversión de oficinas en Milán y un incremento del mercado de inversión de
retail en Madrid. La capital española sumó 956 millones de euros de inversión no residencial en 2013, lo que ha supuesto un crecimiento del 61% en términos anuales.
Respecto al ejercicio precedente, las rentabilidades de las oficinas
prime registraron algunos ajustes durante 2013. En Londres recuperaron el nivel de 3,75% de 2007 para los mejores activos de West End. La fuerte competencia por los activos
prime en las cuatro principales ciudades alemanas, empujó las rentabilidades a la baja entre 5 y 15 puntos básicos durante el último trimestre de 2013. En Milán y Madrid se incrementaron aún el pasado año debido a correcciones adicionales de los precios de alquiler. Las rentabilidades
prime de
retail se mantuvieron estables excepto en Frankfurt, Munich y Milán, donde bajaron.
Por lo que se refiere al contexto económico general, la actual recuperación es aún frágil. Por segundo trimestre consecutivo, la zona euro registró un crecimiento positivo del PIB en el tercer trimestre de 2013, aunque débil (+0,1%). Con un telón de fondo de baja inflación y débil recuperación, el estudio señala que los empresarios se muestran cautos por lo que respecta tanto a la inversión como a la contratación. El consumo se muestra asimismo débil, lo que deja la demanda externa como principal soporte del crecimiento.