Según un estudio de la universidad de Loughborough, École Polytechnique Fédérale de Lausanne y el Grupo VELUX
11 de junio de 2013.- Nuevas investigaciones revelan que algo tan simple como instalar nuevas ventanas y añadir luz natural a nuestro hogar puede tener efectos positivos en nuestro reloj biológico y en nuestra salud en general. El efecto demuestra ser importante para todos los climas europeos, desde el frio norte hasta el caluroso sur y el lejano oriente.
Se sabe ya que la luz natural influye en nuestra sensación de espacio, de confort y hasta en nuestro humor. Sin embargo, el aumento de luz natural en los edificios puede proporcionar muchas más ventajas además de levantarnos el ánimo y conseguir que nuestro hogar resulte más atractivo, como demuestra un nuevo estudio basado en las investigaciones de la universidad de Loughborough, École Polytechnique Fédérale de Lausanne y el Grupo VELUX.
Los estudios de los efectos no visuales de la luz natural y la luz artificial en edificios residenciales, "Daylighting, Artificial Lighting and Non-Visual Effects Study for Residential Buildings", investigaron las secuelas que se produjeron en la vida real de una familia de cuatro miembros tras renovar su casa instalando ocho ventanas de tejado. A nadie le sorprende que las investigaciones revelaran que se consiguió un incremento de la luz natural con el consiguiente ahorro de luz artificial; la gran novedad del estudio apareció en la evaluación de los efectos no visuales en seres humanos por la mejora de la distribución de la luz natural en las habitaciones del hogar.
"La dosis media europea de exposición diaria a la luz suele ser considerada muy baja, lo que tiene un efecto negativo en nuestra calidad de sueño y bienestar. La instalación de las ventanas en el edificio donde realizamos la investigación, incrementó un 55% los beneficios sobre los efectos no visuales de sus habitantes, lo que supone una mejora significativa" Dice Per Arnold Andersen, jefe del Centro de Investigación VELUX para la luz natural, energía y clima de interiores.
Se dice que el insomnio afecta a un tercio de la población y una forma para mejorar el ciclo de sueño del cuerpo humano es asegurarse de recibir una gran cantidad de luz natural durante el día y dormir en completa oscuridad por la noche.
Efectos impresionantes en todos los climas
Aunque la casa familiar que se reformó está situada en Dinamarca, un marco de simulación avanzado ha permitido extrapolar los resultados de las investigaciones a otros ocho países europeos, incluido España. El estudio ha mostrado que, independientemente de las condiciones climatológicas, la instalación de más ventanas de tejado produce también notables beneficios en los efectos no visuales de los españoles.
"Nuestro estudio refleja que en todos los casos, al agregar más ventanas de tejado se consiguió aumentar significativamente la luz natural para la vista; eso mejoró a su vez, el potencial de los efectos no visuales de la luz de los ocupantes del edificio" Comentó el profesor John Mardaljevic.
Además de los efectos no visuales en humanos, el incremento de la luz natural ayuda también a reducir la necesidad de luz artificial en un 16-20%, dependiendo de la orientación y la localización de la casa.
Sobre el estudio
El estudio está basado en un modelo derivado del profesor Marilyne Andersen, de EPFL en Suiza. El modelo se apoya en la documentación sobre fotobiología para extraer el límite de exposición a la luz que tolera el ojo humano en distintos momentos del día y, de ahí, ver la posibilidad que tiene la exposición a una determinada cantidad de luz para producir efectos no visuales tales como aumentar la vigilancia o el estado circadiano.
El marco de simulación usado en este estudio fue desarrollado por el profesor John Mardaljevic de la Facultad de Ingeniería Civil y Arquitectura de la Universidad de Loughborough, Reino Unido.
El estudio es parte de la puesta en marcha de un programa de investigación de los profesores Marilyne Andersen de EPFL (para integrar aspectos dinámicos relacionados con la temporización, la historia y el espectro de exposición a la luz) y John Mardaljevic de Loughborough (para ampliar la capacidad de simulación) con el objetivo de conseguir una base para la evaluación de los efectos no visuales de la luz natural que pueden algún día ser incorporados en las normas de construcción y en guías de diseño.