El despacho de abogados RCD ha trasladado su sede en Madrid a un edificio ubicado en la calle de la Palma, número 10, en una operación asesorada por la consultora inmobiliaria Savills. La nueva sede, propiedad de Grupo Royal Metropolitan, ocupa un edificio histórico del siglo XVIII que fue originalmente construido para albergar la Real Fábrica de Cera y que ha sido rehabilitado recientemente para adaptarse a las necesidades actuales.
El inmueble, con más de 2.900 m2 distribuidos en cinco plantas, ha sido diseñado para fomentar el trabajo colaborativo y la interacción entre profesionales. Entre sus instalaciones destacan una sala polivalente de 450 m2, un espacio audiovisual insonorizado de 60 m2 y varias zonas abiertas, incluidas dos terrazas de más de 200 m2. El edificio cuenta con la certificación de sostenibilidad LEED Gold, reflejando el compromiso de RCD con criterios de eficiencia energética y respeto medioambiental.
Con este traslado, el bufete refuerza su plan estratégico, alineando la nueva sede con sus necesidades de crecimiento y operativas. El espacio busca posicionarse como un punto de encuentro para empresas y profesionales, facilitando la realización de reuniones, eventos y talleres en una localización destacada dentro del sector legal en Madrid.
Adolf Rousaud, socio codirector de RCD, destaca la importancia de esta nueva etapa: “Esta nueva ubicación es perfecta para el desarrollo de nuestros objetivos y un hito en nuestro camino hacia la excelencia, que nos permitirá seguir creciendo y ofrecer un ambiente de trabajo más cómodo, flexible y eficiente para todos”.
Por su parte, Ignasi Costas, también socio codirector, subrayó el carácter dinámico que buscan aportar a la nueva sede: “Queremos que nuestra nueva sede no solo sea un lugar de trabajo, sino un espacio dinámico donde la creatividad y la tecnología se unan para dar forma al futuro. Además, aspiramos a que sea un centro de intercambio de conocimiento y colaboración para la comunidad empresarial en Madrid”.