RICS ha dirigido la vertiente del trabajo relativa al entorno edificado
RICS y la Unión Europea han publicado el informe final de Taxonomía de la UE, creado con el objetivo de impulsar una economía global más sostenible.
Definir lo que es una actividad ecológica es el primer paso para canalizar las tan necesarias inversiones en desarrollos y proyectos bajos en niveles de carbono y resistentes al clima. La publicación de la Taxonomía por la Comisión Europea representa un avance significativo hacia este objetivo; es el sistema de clasificación más completo para las actividades económicas sostenibles hasta la fecha, y apoyará las inversiones que tengan un impacto ambiental positivo.
RICS ha dirigido la vertiente del trabajo relativa al entorno edificado durante los últimos 18 meses, ayudando a definir lo que es "verde" para el sector de la construcción. Este proyecto forma parte de una estrategia integral de la UE, que apoya plenamente la transición hacia una economía sostenible, una de las prioridades clave de la Comisión Europea y del programa de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas.
En este sentido, el presidente de RICS, Tim Neal, explica que "la creación de un lenguaje común para la inversión verde supone un hito, ya que significa que podemos decir con seguridad que estamos ofreciendo espacios sostenibles en los que la gente pueda vivir y trabajar. Los inversores quieren saber qué empresas están ayudando realmente a construir una economía con bajas emisiones de carbono, que sea resistente al cambio climático y que brinde confianza en el valor de nuestro sector como área para la inversión sostenible”.
De este modo, aseguran que al permitir que los propietarios y promotores tengan acceso a productos financieros "verdes", la Taxonomía estimulará la inversión para renovar los edificios menos eficientes energéticamente, para construir otros nuevos y para mejorar el funcionamiento de los ya existentes.
Aquellos que no demuestren las mejores prácticas de acuerdo con los nuevos criterios pueden dejar de ser competitivos y perder la capacidad de calificar sus actividades económicas y productos como "ecológicos", y los requerimientos de los inversores que ello conlleva.
Una iniciativa de la UE con potencial a nivel mundial
Una vez que la Taxonomía pase a formar parte de la regulación de la UE, afectará directamente a las empresas e instituciones que ofrecen productos financieros dentro de la UE, a las que ofrecen servicios no financieros y a los Estados miembros de la UE que certifican productos financieros sostenibles, como, por ejemplo, los "bonos verdes".