Los beneficios fiscales supondrían un ahorro fiscal de entre el 19% y el 23% para personas que para costear su estancia en una residencia necesitan vender su vivienda
La Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias (FAI) reclama al Gobierno un cambio normativo que permita que las personas mayores de 65 años, obligadas a trasladarse a vivir a una residencia, puedan beneficiarse de exenciones fiscales, sin límites de plazos ni condiciones, a la hora de vender su vivienda.
Desde el colectivo aseguran que su reivindicación debe activarse en la agenda del Gobierno, ya que “hablamos de personas que, para poder hacer frente al pago de una residencia, mayoritariamente la única opción que tienen es vender su casa. Por ello, de forma justa, Hacienda no debería contemplar los plazos en la exención fiscal de venta de vivienda habitual para mayores de 65 años que acudan a una residencia a vivir, y más en el actual contexto social y económico en el que nos encontramos”, recalcan.
Desde la FAI recuerdan que, según la actual normativa, para que una persona mayor de 65 años esté exenta del pago de tributos fiscales al vender su vivienda debe haber residido mínimo 3 años en el inmueble que se vende siendo propietaria, es decir, que sea considerada como su vivienda habitual. Partiendo de esta condición, e “injustamente”, en el caso de que una persona mayor de 65 años lleve viviendo más de dos años en un centro de mayores o similares, su casa pierde, de ipso facto, el reconocimiento de vivienda habitual, salvo casos excepcionales de dependencia severa o de gran dependencia.
En este sentido, la reclamación de esta federación pasa por un cambio normativo que no debe hacerse esperar. “Entendemos que el mercado inmobiliario, arropado por políticas sociales y económicas, debe de ayudar a todos los grupos poblacionales a la hora de adquirir o vender un bien fundamental como es la vivienda”, aseguran.
Desde FAI, sostienen que “estamos hablando de beneficios fiscales importantes, con un ahorro del pago de impuestos de entre el 19% y el 23%”.
Asimismo, sostienen que cada vez hay una mayor oferta de viviendas en el mercado cuyos propietarios son personas que ingresan en residencias de mayores, ligada a que la pirámide de población de España continúa su proceso de envejecimiento. Los últimos datos estadísticos del Padrón Continuo del Instituto Nacional de Estadística (INE), cifran en 8.908.151 el número de personas mayores, un 19,1% sobre el total de la población (46.722.980). Un dato al que hay que sumar que cerca de un 4% de este grupo de población ingresa en una residencia y que en los últimos años se estima que vaya en aumento.