El colectivo pide que estas ayudas vayan destinadas con las mismas facilidades a los dueños de inmuebles particulares y no priorice a las comunidades de propietarios
La Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias (FAI) pide que las ayudas anunciadas por el Gobierno central para la reforma de viviendas lleguen en tiempo y forma. Además, demanda que vayan destinadas con las mismas facilidades a los dueños de inmuebles particulares y no priorice a las comunidades de propietarios. Por otra parte, FAI reclama que una partida de estas ayudas vaya dirigida a la reforma de inmuebles que se destinen al mercado de alquiler de vivienda habitual, con mayores incentivos fiscales si estas se arriendan a colectivos vulnerables.
Para ello, considera necesario que se establezca la adecuada coordinación con las entidades locales de cada comunidad autónoma y que la maquinaria burocrática no sea un escollo a la hora de gestionar las citadas ayudas.
FAI cree que el plan de inversiones y reformas 2020-2022 del Ejecutivo de los fondos de la Unión Europea (UE) para la rehabilitación de viviendas, que, además, contempla proyectos de regeneración a gran escala e integral de barrios, es un primer paso que va en buena dirección, a falta de su ejecución. Al respecto, remarca que debe ser una oportunidad real para paliar las actuales carencias que presenta el parque de viviendas.
De hecho, un informe realizado entre las cerca de 900 agencias inmobiliarias que integran la federación y con presencia en las diferentes regiones indica que la media de edad del parque de vivienda usada en España es de 40,1 años.
El mismo informe señala que las principales deficiencias que presentan los inmuebles o edificios de vivienda usada son, por este orden: la falta de ascensor, poco espacio exterior, ausencia de rampas y falta de aislamiento térmico, que evidencian el déficit de inmuebles energéticamente eficientes y que son poco o nada accesibles para las personas con movilidad reducida o personas mayores.
Asimismo, desde FAI subrayan que las propias agencias inmobiliarias sí están percibiendo un aumento en la demanda de este tipo de viviendas eficientes y accesibles, aunque todavía incipiente, debido, precisamente, a la falta de oferta de hogares sostenibles y accesibles.