Merlin Properties ha realizado una emisión de bonos verdes ordinarios no subordinados por un importe total de 550 millones de euros en el euromercado. La operación tiene un vencimiento a ocho años y se ha fijado a un precio de emisión del 99,507% del valor nominal, con un cupón anual del 3,50%, equivalente a 105 puntos básicos sobre midswap. El desembolso y suscripción está previsto para el 4 de septiembre de 2025. Los bonos estarán regidos por la legislación inglesa y se prevé su admisión a negociación en la Bolsa de Luxemburgo.
Los fondos se destinarán a proyectos incluidos en el Green Financing Framework de la compañía, entre ellos el desarrollo de centros de datos, así como a necesidades corporativas generales y, en su momento, a la amortización parcial del bono verde con vencimiento en noviembre de 2026.
La operación llega tras la presentación de resultados del primer semestre de 2025, publicados en julio, en los que Merlin registró ingresos de 275,3 millones de euros, de los que 264,7 millones correspondieron a rentas brutas. La ocupación media del portfolio se situó en el 95,4% y las rentas comparables crecieron un 3,4% interanual. El EBITDA ascendió a 205,3 millones, un 9% más que en el mismo periodo de 2024, mientras que el beneficio operativo (FFO) alcanzó 166,6 millones de euros, equivalentes a 0,30 euros por acción. El beneficio neto contable fue de 512,9 millones de euros.
El valor bruto de los activos (GAV) se situó en 12.120 millones de euros, con un incremento del 3,2% en valoraciones, impulsado sobre todo por el crecimiento del 38,2% en centros de datos. El valor neto de los activos (EPRA NTA) ascendió a 8.476 millones, un 5% más que en diciembre de 2024.
En el plano financiero, la compañía mantiene un LTV del 28,6%, con una liquidez de 1.649 millones de euros y un vencimiento medio de la deuda de 4,4 años. El 100% de la deuda está referenciada a tipo fijo y no se prevén repagos hasta noviembre de 2026, lo que ofrece un marco de estabilidad para esta nueva emisión.