La inversión inmobiliaria en España alcanzó 10.868 millones de euros en los nueve primeros meses de 2025, un incremento del 46% respecto al mismo periodo del año anterior, según datos de BNP Paribas Real Estate. En el tercer trimestre se registraron 3.346 millones de euros, un 37% más que en el mismo periodo de 2024. La consultora prevé que el ejercicio cierre en torno a 14.000 millones de euros, lo que representaría un crecimiento anual cercano al 28%.
El sector hotelero acaparó en el trimestre 943 millones de euros, el 28% del total, con operaciones de unos 30 millones en los destinos tradicionales —islas, Madrid, Barcelona y Costa del Sol— y transacciones de menor volumen en otras plazas, protagonizadas en su mayoría por socimis y vehículos franceses.
El segmento del living sumó 636 millones de euros en el trimestre, frente a los 456 millones de un año antes, y representa casi el 60% de la inversión acumulada en 2025. Destaca el interés por carteras de viviendas en alquiler, desarrollos futuros y edificios adquiridos para su transformación en residencial en renta. Madrid y su entorno concentraron el 62,5% de las operaciones.
En logística, la inversión ascendió a 495 millones de euros, la cifra más alta del año, impulsada por operaciones como la compra por parte de P3 Capital de un portfolio de plataformas en Madrid por 146 millones de euros o la adquisición del complejo logístico de Mango en Cataluña por 170 millones de euros.
El segmento de oficinas registró un repunte con 514 millones de euros, un 64% más que en el mismo periodo del año anterior. El 80% del capital se concentró en Madrid, con operaciones como la compra del complejo KOI por Mutualidad de la Abogacía y la adquisición de Serrano 240.
El sector retail movilizó 436 millones de euros en el trimestre y se espera que incremente su actividad en lo que resta de año por el volumen de operaciones en fase avanzada de negociación. Los locales comerciales de high street mantienen el interés del inversor privado, mientras que los parques y medianas comerciales han sido objeto de transacciones relevantes, especialmente por parte de SCPIs francesas.
En cuanto al perfil inversor, los fondos institucionales concentraron el 50% del volumen, principalmente en portfolios logísticos, viviendas en alquiler y hoteles, mientras que los inversores privados tuvieron mayor presencia en retail y oficinas. Por origen, el capital francés lideró la actividad gracias al dinamismo de las SCPIs.