La transformación urbana es un ámbito prioritario para las ciudades europeas, que afrontan el reto de actualizar su tejido construido, replantear los sistemas de movilidad y redefinir el equilibrio entre la iniciativa pública y la privada. En este escenario, Nhood desarrolla proyectos que integran distintos usos, transforman áreas infrautilizadas y promueven dinámicas participativas desde la fase de diseño. Esta perspectiva centró la intervención de Antonio Morales, Technical & Concept Director de la compañía, en el Desayuno Editorial “Regeneración urbana y smart cities”, organizado por Observatorio Inmobiliario.
Morales señaló que la combinación de usos en un mismo desarrollo se ha convertido en una respuesta necesaria a la evolución de las ciudades. La integración de vivienda, comercio, oficinas, equipamientos o zonas verdes permite optimizar recursos y configurar espacios versátiles, una estrategia que solo puede avanzar con una cooperación efectiva entre administraciones y agentes privados. Según explicó, disponer de un marco normativo flexible es determinante para adaptar los proyectos a las necesidades de cada contexto y facilitar que estos modelos se materialicen.
En este contexto, si analizamos los procesos en ciudades como Bilbao, Dos Hermanas, Málaga, Valencia y Madrid, vemos la realidad de las palabras de Morales, que la capacidad de transformar áreas consolidadas depende directamente de la flexibilidad del planeamiento. En Bilbao, la aprobación del nuevo PGOU en 2022 permitió activar operaciones estratégicas como Zorrotzaurre o Punta Zorrotza tras más de una década de tramitación, mientras que en Valencia la Estrategia Urbana 2030 y el desarrollo de Turianova han reorientado el crecimiento hacia suelos infrautilizados sin necesidad de expansión periférica.
En contraste, ámbitos como Entrenúcleos o la ciudad de Madrid operan todavía con planeamientos de principios de los 2000 o de 1997, lo que obliga a aplicar modificaciones puntuales, medidas transitorias o incentivos para poder adaptar densidades, usos o tipologías a las necesidades actuales. Este contraste confirma que la regeneración urbana solo avanza con estabilidad cuando el marco regulatorio permite ajustar los proyectos a su contexto, incorporar usos mixtos y actuar sobre tejidos consolidados sin depender de procesos largos o excesivamente rígidos.
El directivo de Nhood subrayó también la importancia de revisar planeamientos que, hace dos décadas, favorecieron superficies de gran tamaño con amplios aparcamientos en superficie. Estas configuraciones, hoy identificadas como zonas de elevado impacto térmico, requieren una transformación que incorpore soluciones ambientales y favorezca una movilidad más eficiente. Vinculó esta evolución con el modelo de la ciudad de los 15 minutos, donde la proximidad entre vivienda, trabajo y servicios constituye un objetivo alcanzable si se actualizan criterios urbanísticos y se reorganizan los usos existentes.
Proyectos de Nhood que escuchan y transforman
En su intervención, dedicó especial atención a la regeneración de áreas consolidadas, donde la convivencia entre el tejido preexistente y las nuevas demandas sociales exige procesos de diseño más abiertos. Destacó el caso del centro comercial Vialia Estación de Vigo, donde Nhood llevó a cabo un proceso de consulta ciudadana para definir el destino de un espacio de más de 20.000 m2 situado junto a la estación ferroviaria. El resultado —una plaza pública con vegetación y zonas temáticas— se configuró a partir de estas aportaciones y ha contribuido a reordenar su entorno inmediato. En este proyecto, diseñado por el arquitecto Thom Mayne y desarrollado por los equipos de Morphosis y L35, la compañía trabajó con varias administraciones para replantear un ámbito previamente degradado y convertirlo en un punto de conexión intermodal que integra una estación, una gran plaza pública y un espacio comercial.
La actuación, concebida bajo criterios de proximidad y accesibilidad, ha reforzado la relación entre movilidad, actividad urbana y espacio ciudadano, consolidándose en poco tiempo como un nodo cotidiano para los habitantes de Vigo.
Este enfoque también está presente en la actuación realizada junto al Ayuntamiento de Gijón, donde la colaboración institucional permitió adaptar el proyecto a las necesidades de la población y del contexto urbano.
Se trata de Ronda Roces Parque Comercial, inaugurado a principios de octubre. Promovido en nombre de Ceetrus y desarrollado en coordinación con el Ayuntamiento, contó con una inversión de 20 millones de euros y dispone de 21.300 m2 destinados a aparcamiento, comercio y restauración. La actuación integra medidas de accesibilidad —como un carril bici conectado con la Vía Verde Roces–Gijón, una parada de autobús adaptada y un itinerario peatonal accesible— y soluciones ambientales que han permitido obtener la calificación “Muy Bueno” en BREEAM en diseño y la preevaluación de la certificación AIS.
El parque incorpora zonas verdes, áreas de sombra, pavimento filtrante e instalaciones fotovoltaicas para el abastecimiento de las zonas comunes, así como acciones de colaboración con la comunidad, entre ellas un mural integrado en el circuito de arte urbano de la ciudad y la instalación de hoteles de insectos en colaboración con entidades sociales. La iniciativa fue presentada ante autoridades locales y medios de comunicación, destacándose su contribución al entorno urbano y a los ámbitos social y medioambiental.
Otro caso, que ahora está en curso y cuya apertura se prevé para 2026 según la última información consultada, es el Retail Park La Maquinilla, en el municipio madrileño de Colmenar Viejo. El proyecto, con una superficie en torno a 16.500 m2, se inserta en un tejido urbano ya establecido y contempla la adecuación de accesos, la reorganización de la movilidad interna y la incorporación de zonas ajardinadas y espacios peatonales. La actuación busca mejorar la integración del área con su entorno inmediato y actualizar un ámbito que el municipio venía señalando desde años como susceptible de renovación, especialmente por su conexión con los principales ejes de entrada a la ciudad y con los barrios residenciales próximos.
Morales insistió en que la coordinación entre administraciones y agentes privados es fundamental para abordar intervenciones que requieren ajustar la movilidad, redistribuir el espacio público y responder a las expectativas de los vecinos. En su opinión, estos proyectos solo generan resultados sólidos cuando la toma de decisiones incorpora tanto criterios técnicos como la percepción de quienes habitan los lugares en los que se actúa.
Innovación, financiación y la evolución de las estrategias urbanas
El debate incluyó asimismo una reflexión sobre la financiación vinculada a los fondos europeos. Morales explicó que acceder a programas nacionales de subvenciones o a mecanismos de cofinanciación resulta complejo, aunque Nhood sí participa en iniciativas internacionales respaldadas por la Unión Europea. La compañía forma parte de consorcios con universidades y municipios de ciudades como Budapest, París o Barcelona centrados en sostenibilidad y planificación urbana. Estos trabajos permiten desarrollar proyectos piloto, aplicar metodologías innovadoras y avanzar en estrategias relacionadas con la rehabilitación ambiental, incluida la reconversión de superficies destinadas a aparcamiento en espacios de uso ciudadano. Según detalló, estos programas de investigación ofrecen actualmente mayor capacidad para impulsar nuevas soluciones que los canales estatales de ayuda.
La intervención de Morales puso de relieve que regenerar implica actualizar espacios existentes, adaptar la normativa a nuevas necesidades, incorporar mecanismos de participación y coordinar actuaciones entre administraciones y agentes privados. De hecho, la compañía lleva su visión más allá para impulsar proyectos capaces de responder a nuevas formas de habitar y de relacionarse con la ciudad. Según ha explicado la propia firma, su estrategia se orienta a desarrollar entornos que integren distintas funciones urbanas —incluyendo vivienda flexible, actividad comercial y espacios comunitarios— con el propósito de avanzar hacia modelos más integrados y adaptables.