Más del 50% de los propietarios e inquilinos no firma el fin del contrato de alquiler

Más del 50% de los propietarios e inquilinos no firma el fin del contrato de alquiler
Alfa Inmobiliaria pone en valor la figura del avalista en este tipo de operaciones.
No basta con recibir las llaves y devolver la fianza para dar por concluido el contrato de alquiler, según Alfa Inmobiliaria


Cuando concluye el contrato de alquiler de un inmueble, propietario e inquilino deben firmar un documento que fije las cláusulas del fin de dicho acuerdo. No obstante, “más del 50% de los propietarios e inquilinos no firma el fin del contrato de alquiler, en la mayoría de los casos por desconocimiento y se arriesgan a posibles problemas a futuro” afirma Jesús Duque, vicepresidente de la red Alfa Inmobiliaria.

El fin de contrato es un documento en el que se dan por cerradas y terminadas las obligaciones que puedan haberse fijado al iniciar dicho alquiler y liberan a cada una de las partes de las responsabilidades contraídas.

Este acuerdo debe recoger algunos puntos esenciales como que la vivienda ya está vacía y que el propietario es libre para recuperar la gestión de su inmueble. Asimismo, tiene que reflejar si existen obligaciones pendientes por parte del inquilino, como el pago de recibos de suministros.

“Es importante reflejar la fecha a partir de la cual el inquilino queda libre de la obligación de pagar la renta y es también muy recomendable hacer una revisión conjunta, inquilino y propietario, sobre el estado del inmueble a su entrega”, afirma el directivo.

¿Cuándo es recomendable firmar este acuerdo?

La firma de este documento debe realizarse siempre que concluya la relación comercial entre un inquilino y el propietario, sea cual sea el motivo por el que se llegue a esta situación. Tanto si el contrato llega a su fin, y una de las partes no quiere renovar el acuerdo, como si una de las partes decide (y los supuestos legales le permiten) interrumpir esta relación antes de que el contrato expire, es necesario firmar este documento por ambas partes.

“Es importante también tener en cuenta al avalista”, recuerda Duque. En el caso de los jóvenes que se trasladan a otra ciudad a estudiar o que alquilan por primera vez, es frecuente que cuenten con los padres como avalistas. Esta figura se compromete a pagar cualquier posible deuda en el caso de que los inquilinos no puedan hacerles frente. En estos casos, el directivo de Alfa Inmobiliaria recomienda también que este participe en este fin de contrato, de forma que también quede totalmente liberado de cualquier responsabilidad.