La reforma de la ley se ha quedado "corta" para el vicepresidente del Consejo General del Notariado
28 de mayo de 2013 (EP).- El vicepresidente del Consejo General del Notariado, Joan Carles Ollé, ha advertido de que la reforma de la Ley Hipotecaria se ha quedado "corta" y que la normativa actual "deja atados de pies y manos" a los notarios al no darles la potestad de rechazar cláusulas que consideran abusivas en el momento de celebración del contrato.
En una conferencia en el Senado con ocasión del 151 Aniversario de la Ley de Notariado, Ollé ha hecho referencia a la recien aprobada legislación de medidas para reforzar la protección de los deudores hipotecarios, reestructuración de la deuda y alquiler social, que, aunque ha supuesto un "avance" en aspectos importantes como los intereses de demora, las tasaciones o la ampliación de las suspensiones temporales de desahucios, deberá ser "muy probablemente" completada en otras cuestiones en las que se ha quedado "corta".
Entre ellas, ha lamentado que no ha mejorado la "deficiente" normativa sobre el control preventivo de las cláusulas abusivas. "El sistema actual de fiscalización de las cláusulas basado en la existencia de una sentencia firme y la posterior inscripción en el registro de Condiciones Generales de la Contratación ha fallado estrepitosamente", ha apuntado.
"Debería bastar la sentencia firme publicada desde el Consejo General del Poder Judicial para su obligatoria apreciación por los notarios en el momento de redactar la escritura de hipoteca", ha sugerido. Y es que, a su juicio, la mejor solución pasaría por atribuir a los notarios un "control de legalidad efectivo" sobre las cláusulas abusivas ya que son ellos quienes intervienen en el momento decisivo en que se celebra el contrato.
"Los notarios nos encontramos aquí entre la espada y la pared, para decirlo gráficamente, pues la sociedad nos pide con toda lógica un papel proactivo en el rechazo de las cláusulas abusivas de los contratos pero la realidad es que la legislación vigente nos deja atados de pies y manos", ha ilustrado Ollé, antes de precisar que el objetivo prioritario del legislador debe ser lograr que no haya cláusulas abusivas en los contratos de préstamo hipotecario.