El cambio climático y el riesgo de seguridad alimentaria encauzan las estrategias inmobiliarias a largo plazo, según Savills
Inversores internacionales, entre los que se encuentran Oxford Properties o Nuveen Real Estate, han confirmado que más allá de la pandemia provocada por el Covid-19, siguen plenamente comprometidos con estrategias ESG para hacer frente al cambio climático y a las amenazas a largo plazo que supone para el futuro rendimiento de los activos. Paul Brundage, executive vice president, senior managing director Europe & Asia Pacific de Oxford Propierties asegura que “ya hemos alcanzado el punto crítico. Nos encontramos dentro de él y tenemos que hacerle frente”.
“Para los grandes inversores del sector inmobiliario, hacer frente al cambio climático ya no consiste solo en hacer lo correcto y reconocer que los activos con fuertes clasificaciones de ESG (factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo, por sus siglas en inglés) tienden a alcanzar un rendimiento superior al del mercado, sino que también depende de la resiliencia de la localización de los activos, debido al riesgo físico de incidentes medioambientales”, afirma Sophie Chick, directora de Savills World Research y co-responsable del programa Impacts.
El Covid-19 ha acelerado la percepción del cambio climático
“La acción social a nivel mundial el año pasado –continúa Sophie Chick– está impulsando la actuación por parte de los gobiernos. El Covid-19 ha acelerado la percepción del cambio climático: ha mostrado cómo puede impactar la naturaleza en todo el planeta y ha puesto de manifiesto que, ante las amenazas existentes, los gobiernos y la industria son capaces de tomar medidas rápidas y decisivas que de otra manera nunca habrían contemplado. La innovación desplegada por el sector inmobiliario en las últimas semanas para hacer frente a la pandemia debe aplicarse ahora a paliar el aumento de las emisiones de carbono y contemplar la crisis climática en todas las etapas del ciclo de vida de un edificio. Teniendo en cuenta que la regulación en este sector se va a incrementar, la única solución pasa por un enfoque proactivo”.
Garantizar la seguridad alimentaria, fundamental en las estrategias inmobiliarias
Además de la amenaza de inundaciones y riesgos forestales, uno de los principales riesgos del cambio climático es la seguridad alimentaria, según Savills. Teniendo en cuenta que los bienes inmuebles se establecen en función de la ubicación de las personas, y que las personas necesitan garantizar el acceso a los alimentos, analizar la seguridad alimentaria se convertirá en un factor crucial a la hora plantear estrategias de desarrollo inmobiliario. Savills ha analizado 38 países y los ha clasificado en cuatro pilares de la seguridad alimentaria (disponibilidad, acceso, estabilidad y uso) en su primer Índice de Seguridad Alimentaria, publicado como parte de Impacts. El índice muestra que la seguridad alimentaria varía ampliamente en todo el mundo, incluso entre las regiones más seguras de Europa y América del Norte. Por su parte, Nueva Zelanda es el país más seguro desde el punto de vista alimentario.
Emily Norton, head of Savills Rural Research, señala que “la reciente crisis del Covid-19 ha demostrado la fragilidad de las cadenas de suministro para la distribución de alimentos en distintos países del mundo, pero a medida que la crisis climática se vaya acelerando, las redes de suministro se podrían enfrentar a problemas más persistentes; a largo plazo, las localizaciones para desarrollo se enfocarán cada vez más en aquellos lugares donde las poblaciones puedan acceder de forma segura a los suministros de alimentos”.