MAPEI es muy consciente de la necesidad de la necesidad de utilizar nuevas tecnologías de aditivos para alcanzar los objetivos de descarbonización fijados para el año 2050.
Por este motivo, ha desarrollado el Sistema CUBE, una nueva e innovadora tecnología basada en los pilares “robustez” y “mejora de prestaciones”, con el objetivo de acompañar a la industria del hormigón preparado y prefabricado en la transición de los cementos utilizados actualmente, a cementos con bajo contenido en clínker (o cementos ternarios) y facilitar su empleo con todo tipo de árido (calizo, silíceo, granítico, áridos absorbentes, reciclados, etc.)
Los principales grupos cementeros y hormigoneros del país ya están integrando el Sistema CUBE y cambiando su manera de fabricar el hormigón, pero queda por delante una gran labor de difusión y cambio. Es por ello que Mapei está llevando a cabo una serie de Jornadas Técnicas de formación y divulgación para dar a conocer por qué CUBE es una clara solución para la descarbonización del sector de la construcción.
Fruto de esa labor y de su compromiso real, cuantificable y medible con la Sostenibilidad, se han celebrado ya las tres primeras sesiones en el Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja (Madrid, 6 de junio), en los Laboratorios EQA (Granada, 14 de junio) y en la Ciudad Deportiva del Real Betis (Sevilla, 15 de junio). Todas ellas han contado con una gran acogida de público que quería conocer de primera mano el gran desafío ambiental al que se enfrenta el sector.
Para la realización de las jornadas, Mapei ha contado con la colaboración y participación de las asociaciones e instituciones más importantes del sector, como son ANEFHOP, IECA, ANDECE y EQA Laboratorios; y ya están previstas nuevas Jornadas Técnicas en otras regiones de España, con el objetivo de trasladar las claves de la necesaria descarbonización del sector y el proceso constructivo.
Próximas jornadas:
- Zaragoza (4 de julio de 2023)
- Barcelona (11 de julio de 2023)
En conclusión, la importancia del sistema CUBE de Mapei radica en que permite la transición hacia cementos más sostenibles, de forma que el hormigón del presente y del futuro puedan cumplir con los objetivos ambientales de descarbonización, y a la vez mantengan, en todo momento, sus propiedades mecánicas, reología y durabilidad.