La producción de hormigón mantiene la tendencia descendente, según el informe del tercer trimestre de la Asociación Nacional Española de Fabricantes de Hormigón Preparado (ANEFHOP), con una bajada del 9,2% respecto al mismo periodo del año anterior.
De esta forma, el dato acumulado alcanza los 18,58 millones de m³, un 4,7% menos que en 2021. Un dato anual que se espera, a falta de los datos finales del último trimestre, se mantenga por debajo de 2021 en un 5-7%. Un comportamiento que los expertos estiman se vaya a estabilizar y el volumen de producción para 2023 sea similar al de 2022.
“Las cifras de crecimiento del PIB para 2022 y 2023 se están ajustando a la baja, pero también se está viendo que la falta prevista de fuentes de energía para este invierno se está subsanando mejor de lo esperado. Aunque haya cierta ralentización en la aparición de proyectos nuevos, sí esperamos para 2023 un incremento de actividad de los ya iniciados y de aquellos bajo los requisitos de los Fondos Europeos”, explica Carlos Peraita, director general de ANEFHOP.
Entre los factores que explican este descenso de la producción, además de los incrementos de costes sufridos durante todo el curso, son la ralentización e incluso paralización de los proyectos, la renuncia de muchas empresas para no suministrar a pérdidas, y el gran número de licitaciones desiertas. “Datos recientes cifran en 1.455 millones de euros las licitaciones desiertas correspondientes al periodo de enero a septiembre de 2022. La falta de un modelo de ajuste de costes en los procesos de licitación ha provocado que muchos de estos proyectos de ejecución no sean viables a los costes inicialmente previstos”, señala.
Descenso en las CCAA con mayor volumen de actividad
Esta tendencia a nivel nacional se ve reflejada también en el comportamiento regional, donde solo 3 Comunidades Autónomas han conseguido superar la cifra de producción de 2021: Castilla La Mancha, Murcia, y Ceuta y Melilla. Pese a que en el dato anual acumulado son 9 CCAA las que todavía mejoran sus cifras, se ha producido un descenso marcado en aquellas de mayor volumen. “Es en estas Comunidades donde más está constando recuperar el nivel de actividad, como son Madrid, Andalucía y Cataluña que se sitúan un 10, 9 y 4% por debajo, respectivamente, a sus datos de 2019”.
Perspectivas para el último trimestre de 2022 y 2023
Una vez terminado el año, aunque no dispongan de las cifras definitivas del cuarto trimestre, desde ANEFHOP adelantan que la previsión del último periodo del año no es buena. Se aprecia por parte de los empresarios cierta parada de la actividad, a la que se unen las fuertes lluvias que detuvieron la producción por varios días en diciembre. En cuanto a 2023, además de la incertidumbre del volumen, se va a producir un incremento de costes de materias primas en el mes de enero, por lo que habrá que ver cómo puede afectar esta subida a la ejecución de los proyectos y a la rentabilidad de las empresas.