La emancipación de los jóvenes españoles es de las más tardías de Europa

La emancipación de los jóvenes españoles es de las más tardías de Europa
  • El 40 % de los jóvenes españoles menores de 34 años vive todavía con sus padres, según el II Observatorio de la Vivienda en España de Century21 España

  • La calidad de la construcción, el acceso al transporte público y la eficiencia energética son los tres factores más importantes a la hora de elegir su primera vivienda como emancipados

11 de julio de 2019.- El 40,2 % de los jóvenes españoles menores de 34 años vive con sus padres y la edad media de emancipación de este segmento de la población se ha establecido en los 29 años, tres más tarde que la media europea, a pesar de que su deseo es hacerlo a los 27 años. Estos son los datos que desprende el . Según este informe, las principales razones por las que la emancipación llega a una edad tan tardía en España están vinculadas de forma ineludible con la inestabilidad laboral, los bajos ingresos, la falta de oferta por parte del mercado inmobiliario ajustada a sus capacidades económicas, la mayor duración de la etapa formativa y los fuertes vínculos. Según Ricardo Sousa, CEO de la red de Century21 España “es necesario conocer y entender el contexto social en el que se mueven nuestros jóvenes para poder introducir condiciones que favorezcan su entrada en el mercado de la vivienda y facilitar su emancipación”. Tal y como demuestra el estudio, el 45% de los jóvenes menores de 35 años no está emancipado y su paso hacia la emancipación se produce cada vez más tarde: entre los jóvenes de 18 a 24 años sólo el 30,5% vive fuera de casa de sus padres; esta cifra se incrementa hasta el 57% entre quienes tienen de 25 a 29 años, y se eleva al 80% en el caso de los jóvenes de 30 a 34 años. Esta situación es algo más frecuente en el caso de las mujeres (57,9%) que en la de los hombres (51,4%). Aunque el 44,8% de los jóvenes participantes en este estudio han afirmado ser económicamente independientes cabe destacar que de éstos hay un 18,1% que afirma continuar viviendo en casa de sus padres, un dato que resulta coherente ya que los jóvenes no emancipados han otorgado 7,4 puntos sobre 10 a su nivel de satisfacción con respecto a su vivienda actual, en este caso, la casa familiar. Pero a pesar de que el grado de satisfacción de los jóvenes con su vivienda actual es elevado, lo cierto es que 8 de cada 10 jóvenes afirman que no viven donde les gustaría por tres razones principales: al 40,4% le faltan recursos económicos a pesar de estar activo laboralmente, el 24,6% continúa estudiando y un 11,7% no tiene trabajo. Tan sólo un 6% de los jóvenes participantes en este estudio han afirmado estar bien donde está viviendo actualmente. En cualquier caso, los jóvenes españoles no emancipados lo tienen claro a la hora de dar el salto hacia la emancipación: su primera vivienda debería tener una superficie de 75 m2, tres dormitorios y dos cuartos de baño, siendo la calidad de la construcción (54,4%), el acceso al transporte público (43,9%) y el grado de eficiencia energética (41,1%) los tres factores más importantes que tendrían en cuenta a la hora de establecerse en su primera vivienda fuera del hogar familiar. “El análisis de esta realidad social de la juventud en su contexto global ha de llevar a todos los agentes involucrados como las promotoras e inversores a ofrecer alternativas flexibles y accesibles, adecuadas a sus condiciones económicas, sus expectativas, sus hábitos de convivencia y los procesos de transición hacia la vivienda definitiva”, concluye Sousa.