"La digitalización y la industrialización permiten ahorrar tiempo y costes"

La digitalización y la industrialización están teniendo un impacto muy significativo en todos los procesos constructivos, y en la entidad colaboradora urbanística AECLU, especializada en la tramitación de las licencias urbanísticas, declaraciones responsables y comunicaciones previas necesarias para el inicio o modificación de actividades, son muy conscientes de ello. Alejandro Arroyo Sampayo, arquitecto de esta entidad, manifiesta, como punto de partida, que tanto la digitalización como la industrialización, “al ser herramientas, no son positivas ni negativas en sí mismas, sino que van a hacer más rápidos o más fáciles los procesos constructivos que desarrollemos con ellas”. Dependerá, por tanto, del propósito con que se usen “que sirvan para un objetivo en concreto u otro”, continúa el arquitecto.En el sector de la construcción, según indica Arroyo, “el BIM es el ejemplo más paradigmático porque es una herramienta poderosísima y además tiene un impacto directo en el sector inmobiliario”. Esta tecnología permite a los técnicos desarrollar de manera mucho más rápida la fase de diseño, lo que, en palabras del arquitecto de AECLU, “tiene una repercusión en el ahorro de costes y también en el recorte de los periodos de amortización de las inversiones inmobiliarias”.Y precisamente ahí es donde entran de lleno las entidades de colaboración urbanística. Alejandro Arroyo explica que, gracias al BIM, es posible “crear modelos en 3D de las parcelas en las que se reflejen los parámetros básicos de edificación, que luego los proyectistas puedan descargar en su propio software de diseño”. De esta forma, tanto la corrección de esos parámetros urbanísticos como el diseño propiamente dicho se realizan “de forma simultánea, en lugar de relegarlo a una fase posterior, con toda la dilatación de tiempos que eso conlleva”. Así, prosigue el arquitecto de AECLU, “se ahorra mucho tiempo en la tramitación de licencias, lo que es un factor clave a la hora de plantear inversiones inmobiliarias”.Respecto a otras herramientas relacionadas con la digitalización o la industrialización como la impresión 3D o la prefabricación, Alejandro Arroyo reconoce que “están un poco más en ciernes, pero a pesar de ello tenemos, sobre todo en Madrid, ejemplos muy significativos”. En este sentido, el representante de AECLU señala que “en Alcobendas, por ejemplo, está el primer puente peatonal impreso en 3D del mundo; en San Sebastián de los Reyes se está construyendo un edificio prefabricado de vivienda en altura que es 100% reciclado y es el primero de Europa, y también en 2021, en Móstoles, se construyó un edificio que fue el primero 100% prefabricado de España de viviendas en altura”.

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