La demanda europea, clave para la recuperación del sector hotelero de Baleares

La demanda europea, clave para la recuperación del sector hotelero de Baleares
Palma de Mallorca.
A pesar de registrar un 87% menos de turistas en 2020, el turismo doméstico representó el 30% de la demanda total, muy por encima del 8% de años anteriores


La recuperación del sector hotelero de las Islas Baleares, muy vinculado al viajero internacional, dependerá de la reactivación de la demanda procedente de los países europeos, especialmente de Alemania y Reino Unido, principales emisores de turistas. No obstante, la creciente actividad inversora registrada en los últimos meses sugiere un mayor dinamismo en el sector este año. Así se desprende del informe sobre el mercado hotelero en las Islas Baleares que ha elaborado CBRE.

El estudio pone de manifiesto el impacto de la COVID-19 en el sector hotelero balear, que registró el pasado año un 87% menos de turistas. No obstante, el turismo doméstico representó el 30% de la demanda total frente al 8% de años anteriores.

“A pesar del alivio de las restricciones en mayo de 2020, muchos hoteles decidieron no reabrir debido a la baja demanda hotelera. Esto se tradujo en cerca de 170.000 camas disponibles en agosto, distribuidas en aproximadamente 675 establecimientos hoteleros, lo que supone la mitad de la oferta disponible un año antes”, comenta Tonia Vera, directora regional de CBRE en Palma de Mallorca.

En este sentido, la tasa de ocupación media en las Islas Baleares se situó en un 35,2% de las habitaciones disponibles en 2020, un 53,7% menos que el año previo. Asimismo, la contracción de la demanda provocó la caída de la tarifa media del destino en un 13,1%, hasta los 82,4 euros. Como consecuencia de estos descensos, el ingreso medio por habitación disponible se contrajo un 56% respecto al ejercicio anterior.

Vera señala los factores clave para la progresiva recuperación del sector: “El nivel de actividad turística este año dependerá de la evolución del plan de vacunación y de las restricciones a la movilidad, tanto en España como en los principales países emisores. No obstante, la recuperación total del sector no se alcanzará hasta, al menos, 2023”.

Reactivación de la actividad inversora

A pesar del descenso de la inversión hotelera a nivel nacional, que cayó un 59% hasta los 1.000 millones de euros, se notificaron transacciones relevantes en el último trimestre de 2020, como la venta del Hotel Formentor en Mallorca. Al respecto, la directora regional de CBRE en Palma de Mallorca indica que “esta importante operación junto con otras transacciones registradas en las islas situó a Baleares como la región española con mayor actividad hotelera, al acaparar el 33% de la inversión a nivel nacional. La reactivación de la actividad inversora registrada a finales de 2020 nos invita a pensar que seguirá incrementándose en los próximos meses”.

Según el informe de la consultora, la necesidad de algunos propietarios de desprenderse de sus activos por el freno de la actividad operativa y la incertidumbre en el mercado, así como el interés que siguen mostrando los inversores por este sector, incrementará la confluencia de las expectativas de compradores y vendedores. “Todo ello permite augurar una actividad transaccional considerablemente superior durante el 2021, que se acelerará especialmente a partir del segundo semestre, siempre y cuando los inversores no exijan grandes descuentos”, manifiesta Vera.

Del informe se desprenden también algunas de las tendencias que van a marcar el mercado hotelero, como la reactivación de alianzas estratégicas para ganar competitividad, así como el desarrollo de productos adaptados a las nuevas necesidades de los clientes, como zonas de coworking en los hoteles o conceptos de Food and Beverage que atraigan al público local.