Se trata de una contracción que tendría lugar igualmente en un contexto sin pandemia, pero que se está viendo acelerada por la situación actual
A pesar de la penetración del teletrabajo durante el último año con motivo de la pandemia, los espacios de oficinas se siguen percibiendo como un lugar esencial para las compañías y sus trabajadores, ya que fomentan la interacción y contribuyen al aprendizaje, la creatividad, el desarrollo y la colaboración. Por este motivo, la demanda de oficinas en España va a seguir latente en el futuro, aunque podría registrar un ligero ajuste del 7% en los próximos tres años por el impacto del teletrabajo, según un estudio de CBRE.
“La reducción neta del 7% que podría experimentar en los próximos años la demanda de oficinas es resultado de la propia dinámica del sector. Se trata, por tanto, de una contracción que tendría lugar igualmente en un contexto sin pandemia, pero que se está viendo acelerada por la situación actual”, explica Alfonso Galobart, vicepresidente de CBRE España, head A&T CBRE Continental Europe y head agile CBRE EMEA. El directivo añade que “la necesidad de oficinas y de espacios de trabajo que fomenten la co-creación y la interacción entre personas no va a desaparecer”.
De acuerdo con el informe de la consultora, un incremento del teletrabajo durante más tiempo en un contexto de modelo híbrido no reduce per se la necesidad de espacio de oficinas. “Para que sea efectiva la contracción del espacio sería necesario evitar picos de asistencia, normalmente en los días centrales de la semana, lo que obligaría a las empresas a planificar detalladamente la asistencia de los empleados a la oficina, limitando por tanto sus opciones de elección y flexibilidad”, sostiene Galobart.
Precisamente, los trabajadores demandan, cuando vuelva la normalidad, un mayor tiempo de trabajo en las oficinas. Según el reciente estudio de CBRE “Un año de teletrabajo”, en el que han participado más de 2.300 empleados en España de empresas de diferentes sectores, el 80% de los trabajadores quiere que la oficina sea su principal lugar de trabajo al menos tres días a la semana. En este sentido, el 28% de los encuestados quiere trabajar desde la oficina los cinco días de la semana, seguido por otro 29%, que iría tres o cuatro días, y un 23%, que optaría por dos o tres jornadas.
Por el contrario, solo un 14% quiere teletrabajar cuatro o cinco días. La distancia con los compañeros y clientes (35%), la situación del hogar (26%) y la tecnología y el equipamiento (22%) son los principales motivos de ineficiencia que muestran los empleados.
Asimismo, CBRE prevé un aumento del espacio por trabajador en el corto-medio plazo, derivado de una demanda de mayor distancia interpersonal entre los empleados por motivos de seguridad. “El diseño de las oficinas deberá adaptarse a una forma de trabajo distinta, que convine el remoto con el presencial, y que ponga a disposición de los empleaos suficientes espacios adaptados para tener reuniones online, por ejemplo, sin ocasionar molestias a otros compañeros, así como más espacios de interacción y colaborativos”, comenta Galobart.
En paralelo, de acuerdo con las previsiones de CBRE Research, el teletrabajo en España supondrá de media alrededor del 22% de la jornada semanal en un entorno post-COVID, lo que equivaldría a algo más de un día de teletrabajo a la semana y una reducción de alrededor del 14% del espacio requerido. No obstante, el vicepresidente de CBRE España explica que “son varios los factores que contrarrestan este impacto del teletrabajo, puesto que las empresas necesitarán seguir teniendo suficiente espacio en sus oficinas para garantizar la distancia interpersonal de los trabajadores y evitar aglomeraciones en picos de asistencia. Por estos motivos, hablamos de una reducción en el entorno del 7%”.
El experto añade que “si bien es cierto que la demanda estructural de oficinas se reducirá, como lo ha venido haciendo, por otra parte, desde hace años, esperamos que la recuperación económica será suficientemente fuerte como para estimular la demanda de oficinas (crecimiento del PIB del 5,6% en 2021 y del 6,6% en 2022, según el House View de CBRE)”.
Además, las previsiones de aumento de nuevos puestos de trabajo (de acuerdo con Oxford Economics, son 176.000 personas en Madrid hasta 2025 y 120.000 en Barcelona, lo que supone un crecimiento interanual del 2,3% y el 2,5%, respectivamente) apuntan a un aumento de la demanda de espacio por parte de empresas de sectores que necesitan oficinas.
Las rentas tampoco van a sufrir el impacto del teletrabajo. “Tras un ligero reajuste en 2021, prevemos un alza de las rentas prime, variable según los submercados, que podría llegar al 1,9% interanual durante los próximos cinco años”, concluye Galobart.