El aumento de los costes de construcción ralentiza proyectos y reduce los márgenes inmobiliarios

El aumento de los costes de construcción ralentiza proyectos y reduce los márgenes inmobiliarios
El incremento de costes de los materiales ralentizará las nuevas promociones. ©Bardahl Industria
Reducción de los márgenes y ralentización del inicio de las nuevas promociones son dos de las principales consecuencias del aumento de costes de los materiales que sufren promotores y constructores


Según los datos recogidos por CBRE y Bovis en el estudio “Impacto del aumento de los costes de construcción en el sector inmobiliario”, la obra no residencial es la más afectada por ser más intensiva en los materiales que han registrado mayores subidas de precio. Actualmente, el sector de oficinas dispone de 825.000 m2 en construcción o rehabilitación en Madrid y Barcelona; el retail, de 678.000 m2 repartidos por todo el territorio español; y el sector logístico, de 835.000 m2 entre la zona centro y Cataluña. Y debido a la situación actual se está produciendo un retraso medio de 2-3 meses sobre la fecha inicial prevista de fin de obra, con incrementos medios del precio del 20%-25% en oficinas y retail, y del 8%-10% en espacios logísticos.

En el sector residencial, se prevé que el incremento de los costes de material presione al alza los precios de obra nueva, siendo éstos entre un 3% y un 5% mayores, lo que impactará directamente en la oferta, que posiblemente sufra un descenso debido a la inviabilidad de algunos de los proyectos.

"La espiral inflacionaria afecta a todos los eslabones que conforman la cadena de desarrollo inmobiliario", explica Lola Martínez Brioso, directora del departamento de Research de CBRE España. Además -añade- "el aumento de los costes impactará en las rentas, que serán más altas, lo que afectará a las rentabilidades".

Impacto al constructor y promotor

Promotores y constructores también se verán afectados por la evolución de ambos factores (inflación y coste de los materiales), ya que, en las obras en ejecución los beneficios disminuyen para el constructor o incluso entran en pérdidas que pueden llevar a la insolvencia a empresas pequeñas. Además, provoca un aumento de reclamaciones al promotor, que conlleva la revisión del presupuesto para mitigar el impacto, se aumenta el riesgo de incumplimiento de plazos, la posible paralización de obra y se produce un impacto negativo en el plan de negocio, entre otros.

En el caso de obras en estudio, el constructor se ve obligado a subir los presupuestos para cubrir aumentos imprevistos de materiales, además de ampliar los plazos de ejecución y de reducir el plazo de validez. Esto supone para el promotor una mayor vigilancia del riesgo constructor, con presupuestos entre un 10% y un 25% superiores a hace un año, que superan las previsiones.

De cara al próximo ejercicio, Alberto de Frutos, director general de Bovis Project Management, opina que, "aunque el impacto a largo plazo de la subida de los costes dependerá de su persistencia y la potencial corrección posterior, pensamos que los costes de la construcción ya están cerca de los máximos y corregirán significativamente en 2022".