La llegada de Apple en 2012 supuso el inicio de este cambio
La consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield ha presentado el informe “Marketshot Plaça Catalunya”, que analiza la gran transformación del centro de Barcelona, que ha pasado de ser un gran centro financiero a albergar importantes operadores comerciales. Este cambio se ha traducido en rentas al alza y tasas de disponibilidad en mínimos.
En su momento, Plaza de Cataluña llegó a ser el gran centro financiero de Barcelona. En la plaza se situó el Banco Español de Crédito, además de otros siete edificios bancarios, entre los que destacaban el Banco Central, el Banco de España, el Banco de Bilbao, el Banco de Vizcaya y la Banca Arnús.
Años más tarde, “la llegada de Apple, en 2012, aceleró la tendencia de crecimiento y transformación de la plaza. Después de un paréntesis en el que se concebía como un entorno no consolidado y después de muchos intentos de transformar la plaza, el aterrizaje del gigante californiano dio paso a otros operadores como Urban Outfitters, Desigual, Zara, MediaMarkt o Huawei”, ha explicado el director de Retail de Cushman & Wakefield en España, Rob Travers.
Con esta transformación se ha producido un descenso de la disponibilidad y el aumento de las rentas, que en algunos casos llega a niveles de la renta prime de Paseo de Gracia (275 €/m²/mes). Es decir, desde 2012 las rentas han aumentado un 120 % en la zona.
El 64 % de los locales disponen de más de 5.000 m2, convirtiendo a la zona en una de las pocas ubicaciones de la ciudad donde los operadores pueden encontrar espacios de gran tamaño.