El mundo inmobiliario es un sector en constante evolución y modernización para adaptarse a las nuevas demandas de inquilinos, consumidores e inversores. Este proceso afecta por igual a todos los segmentos y, también, a aquellos dedicados al sector Life Science.
Atrás quedaron los tiempos en que los edificios destinados a Life Science se caracterizaban por tener superficies blancas, frías y cegadoras. También quedó atrás la división de los espacios de trabajo de laboratorios y centros de investigación en espacios estancos y aislados en los que los técnicos y científicos trabajan recluidos en cajas de cristal.
Hoy en día, gracias a un diseño centrado en el ser humano, enfocado en las necesidades de los inquilinos y que fomenta la creación de espacios de colaboración y gestión del conocimiento, los edificios destinados a actividades Life Science se están convirtiendo en lugares más acogedores y agradables para las miles de personas que trabajan en ellos.
Ahora la atención a la hora de diseñar los espacios de trabajo se centra en potenciar la experiencia y el bienestar de los empleados, y los servicios que antes se asociaban a empresas tecnológicas y financieras aparecen cada vez con más frecuencia en los proyectos de diseño de centros de trabajo de Life Science. En un sector en el que el conocimiento y el know-how de los empleados es un factor vital para el negocio, un diseño user-friendly se consolida como una de las claves para atraer y retener el mejor talento.
"Hay una demanda creciente de instalaciones cómodas, bien ubicadas, de última generación y con una concepción del espacio que aporten dinamismo, favorezcan el trabajo híbrido y fomenten la colaboración"
Adrian Davidson, EMEA Head of Design de Tétris.
Como explica Adrian Davidson, EMEA Head of Design de Tétris, la división de construcción y diseño de JLL: "Las empresas farmacéuticas, biotecnológicas y que operan en el ámbito de las ciencias de la vida compiten con otros sectores por el talento. Esto significa que hay una demanda creciente de instalaciones cómodas, bien ubicadas, con equipamientos de última generación y con una concepción del espacio que aporten dinamismo a los empleados, favorezcan el trabajo híbrido y fomenten los espacios de colaboración entre los miembros de la plantilla".
Uno de los mejores exponentes de la evolución conceptual que están experimentando estos centros de trabajo son las oficinas de AstraZeneca en Milán. Diseñadas por Tétris con el objetivo de poner a las personas en el centro, con abundante uso de materiales naturales, fomentando el contacto de los empleados con la naturaleza y espacios recreativos para relajarse. En definitiva, un proyecto para aprovechar el diseño para crear no sólo un lugar de trabajo, sino un entorno experiencial –en total armonía con el contexto urbano circundante– dinámico, flexible y vanguardista, donde las personas puedan sentirse a gusto, interactuar espontáneamente entre ellas y desarrollar redes de colaboración.
El concepto de estas nuevas oficinas de AstraZeneca se inspira en el concepto "Mens sana in corpore sano” que se traduce en la creación de zonas de trabajo multifuncionales caracterizadas por una movilidad fluida que subraya la idea de un entorno conectado y vibrante.
El resultado del trabajo de Tétris es una oficina viva y regeneradora que destaca por el uso abundante de la biofilia, creando una sensación de bienestar para la mente y el cuerpo y fluidez para potenciar la relación entre el hombre y la naturaleza.
Otro ejemplo de cómo el diseño de espacios de trabajo de empresas dedicadas a las Life Sciences puede marcar la diferencia son las oficinas de Bayer en Varsovia. Un centro de trabajo que Tétris planificó y diseñó para conciliar los hábitos de los empleados veteranos con las expectativas de los nuevos.
En España, una muestra clara de cómo están evolucionando este tipo de espacios es el Instituto Médico Ricart – clínica especializada en dermatología y estética–. Ricart, bajo el diseño y construcción de la ingeniería Diermar y Tétris, transformó los 1.000 m2 de la antigua sede de Inditex en el Paseo de la Castellana en un espacio clínico con ambiente cálido, mobiliario doméstico y donde la vegetación juega un papel fundamental.
Los principios de diseño centrado en el ser humano y los modelos operativos híbridos también están cobrando importancia en todos los tipos de espacios dedicados a las Life Sciences. Aunque los científicos necesitan estar en el laboratorio para realizar determinadas tareas, se sigue insistiendo en el papel del lugar de trabajo y en cómo las empresas pueden mejorar la experiencia de sus trabajadores, incluidos aquellos con un modelo mixto entre trabajo presencial y en remoto.
Por tanto, para todos aquellos empleados que no desarrollan su función en los laboratorios y que tienen la posibilidad de trabajar en remoto, el aumento del trabajo híbrido ha supuesto que las empresas adopten un enfoque más informal y hospitalario en el diseño del lugar de trabajo para competir con los cómodos entornos de trabajo que los empleados tienen en casa y hacer la vuelta a la oficina más cómoda y atractiva.
"El diseño centrado en el ser humano es crucial para que la gente se sienta cómoda. Crear rincones de intimidad con más confort, suavidad, color y variedad visual ayuda a las personas a conectar a nivel humano y es entonces cuando se pueden hacer avances y se produce la innovación", señala Adrian Davidson.
Para ello, diseñar e instalar un mobiliario móvil o modular, a menudo con alimentación integrada para pantallas o pizarras digitales, es clave, ya que da a los usuarios la libertad de "modificar el espacio para adaptarlo a sus necesidades" cuando colaboran con sus colegas, ya sea en persona o en línea.
"El diseño centrado en el ser humano es crucial para que la gente se sienta cómoda"
Adrian Davidson, EMEA Head of Design de Tétris.
En Sudáfrica, Sanofi tenía unos requisitos muy claros para el rediseño de su sede, dice Adrián Davidson. El bienestar del personal era de vital importancia, y no sólo la luz o la calidad del aire.
"Había que apoyar el trabajo flexible, haciendo hincapié en la cultura del café y en zonas cómodas para atraer a la gente a la oficina", dice Davidson. "Se examinó con lupa la ergonomía de cada una de las sillas".
Pero no todo el trabajo de diseño para empresas del ámbito de las Life Sciences se produce en sus espacios destinados a oficinas corporativas; sino también a los laboratorios e instalaciones tecnológicas.
Si las necesidades de los inquilinos de oficinas han cambiado diametralmente en la última década, las demandas para los laboratorios no se han quedado atrás: gracias a avances tecnológicos como la informática de alta velocidad, la IA, el modelado virtual y la impresión 3D, la investigación científica es cada vez menos industrial, más limpia y cada vez más basada en datos.
Así, las empresas son ahora capaces de albergar más elementos del flujo de trabajo de investigación bajo un mismo techo, o incluso en la misma planta, reuniendo a varios equipos técnicos y de funciones de apoyo para mejorar la eficiencia en la producción, generar sinergias entre departamentos y equipos y la velocidad y agilidad a la hora de poner en marcha la comercialización de los productos y bienes generados por las empresas farmacéuticas o biotecnológicas.
La creciente demanda de inmuebles de calidad en zonas urbanas hace que la disponibilidad de espacio también se esté convirtiendo en un problema, lo que obliga a los inversores a reubicar y modernizar los edificios existentes; con las consiguientes necesidades de rediseño de los espacios para adecuarlos a una nueva actividad.
"Los antiguos locales comerciales o centros comerciales son ideales porque tienen porque tienen techos más altos y mejores espacios de circulación"
Chris Legg, Associate Director for Cost Management en JLL Life Sciences Project Development Services team.
Esto supone un reto enorme para los equipos de diseño y construcción: diseñar espacios con los complejos requisitos técnicos que necesitan las empresas de Life Science. Según Chris Legg, Associate Director for Cost Management en JLL Life Sciences Project Development Services team, es fundamental realizar estudios de viabilidad adecuados, calcular los costes del ciclo de vida de los activos y gestionar los proyectos.
"Convertir oficinas en laboratorios puede tener costes ocultos debido a la ventilación adicional y a los sistemas MEP necesarios", afirma Legg. "Los cambios de aire y las condiciones de regulación de la temperatura pueden necesitar una planta adicional en el techo, lo que añade peso, además de necesitar una mayor altura de libre para instalar los conductos necesario, lo que significa que pueden ser necesarias modificaciones estructurales".
Sin embargo, algunos tipos de inmuebles son más fáciles de reconvertir, sobre todo aquellos diseñados en un principio para albergar grandes plantillas o para acoger a numerosos clientes. Según Legg, "los antiguos locales comerciales o centros comerciales son ideales porque tienen techos más altos y mejores espacios de circulación, como atrios centrales para reuniones, cafeterías y espacios comunes de descanso".
Clave para mejorar el bienestar físico y mental
En este sentido, uno de los ejemplos paradigmáticos es el de The Reef Group, una compañía que está reconvirtiendo tiendas vacías de Stevenage (Reino Unido) en espacios de laboratorio, así como lugares para comer y pasar el rato, como cafeterías, bares y un cine, para crear un entorno de trabajo más social que atraiga a los jóvenes talentos.
Ahora que la experiencia y el bienestar de los empleados ocupan un lugar más destacado en la agenda de las empresas, están apareciendo servicios como instalaciones de bienestar, gimnasios y salas de masajes, además de grandes espacios para eventos, junto a requisitos más tradicionales. Empresas como Bayer y AstraZeneca están abriendo camino para hacer que los edificios dedicados a Life Science sean más sociables y confortables. El ADN del sector inmobiliario del Life Science está cambiando y el futuro parece prometedor.